Pasar las vacaciones en el mismo lugar desde hace ya más de veinte años te sitúa en un escenario habitado por relajadas rutinas que tienden a imitar a las que te pertenecen por derecho propio el resto del año. Una de ellas es elegir tu particular “bar de abajo”, ese establecimiento que no necesariamente está ubicado físicamente justo “abajo” de tu casa, pero que lo asumes y reconoces como parte indivisible e indisoluble de tu hogar.
Así me pasa en agosto, que también tengo mi particular “bar de abajo”. Y a él me dirigí el lunes por la tarde a ver el partido del Sevilla Fútbol Club contra el Getafe. Me senté en mi sitio favorito, justo a media distancia entre la puerta de entrada y el televisor de plasma, y, sin apenas tiempo para saludar, ya me estaban poniendo por delante un ron Pálido con cola. Acto seguido, con los jugadores ya en el campo y a punto de comenzar el partido, el dueño del bar cogió el mando a distancia, sintonizó otra cadena y en la pantalla apareció el comienzo del partido Mirandés – Amorebieta a la vez que él me guiñaba el ojo de manera cómplice. A nadie pareció importarle un pimiento. Un parroquiano llegó a preguntar si los de rojo eran los del Mirandés. El dueño contestó afirmativamente, me señaló y añadió “es que este es de Miranda”, justificando de esa manera el cambio de canal ante mi, qué podía decir, absoluto silencio. Y así pasé la tarde-noche hasta el pitido final con el dos a cero en el marcador.
Ayer me dispuse a leer las crónicas deportivas, para enterarme al menos de cómo había transcurrido el partido del Sevilla Fútbol Club y poder comentarlo aquí con ustedes y, tras ojear varios periódicos digitales y de ámbito nacional, me quedó muy claro que el fichaje de Mbappe por el Real Madrid está más cerca que nunca por la posible llegada al PSG de Cristiano Ronaldo. Me enteré de que Ancelotti vuelve a tener dudas con el rendimiento de Hazard y que Modric es, a fecha de hoy, seria duda para jugar contra el Betis. También pude conocer que Isco estaba implicándose mucho en el nuevo sistema de juego impuesto por el entrenador para evitar ser incluido en la lista de salidas y cesiones que tiene pensado el presidente para lo que resta de mes. Por último, otro gran titular daba pie a una extensa y presunta noticia sobre cómo sería el recibimiento de Mbappe en el nuevo y flamante estadio Santiago Bernabéu.
Gracias a los mensajes de Whatsapp de mis amigos, pude saber que el partido había sido, en general, bastante aburrido pero que el Coco Lamela había puesto el broche de oro a una magnífica jugada del equipo en el más que avanzado descuento, poniendo el cero a uno en el marcador, los tres puntos en el casillero del Sevilla Fútbol Club y el nombre del equipo en lo más alto de la tabla clasificatoria.
Pero a la prensa nacional, que el Sevilla Fútbol Club sea líder le importa un pimiento. Esta Liga la va a ganar el Real Madrid porque el Barça está en crisis, porque al Atleti ya le vale con la del año pasado y porque los fuera de juego se pitan en función del color de la camiseta del equipo afectado. Les parece hasta más reseñable que el Mallorca ocupe la quinta posición en la tabla. Seguro que más de un periodista capitalino tiene ya en la carpeta de Borradores el adjetivo “matagigantes” para aplicárselo a nada que ganen dos partidos seguidos más.
Pero el Sevilla Fútbol Club… Lo que ya les digo: un pimiento. Su ignorancia es nuestra sabiduría. Sus obviedades son nuestras certezas. Su manifiesto ninguneo es nuestra orgullosa relevancia. Viene de lejos que les importemos un pimiento. Lo sabemos. Pero nos importa tan poco y tenemos tanto arte y fair play que no se nos ocurre mejor cosa que plantarnos un orgulloso pimiento en la camiseta en el espacio destinado a la publicidad.
Y aunque el pimiento en cuestión no tiene denominación de origen de Padrón, si les pica, que les va a picar, el mejor remedio que les podemos ofrecer es mezclar ajo y agua.
A los que se dicen periodistas deportivos de muy diferentes medios, nuestro equipo, es un grano en las posaderas, pero por ahí tienen que picar mucho los pimientos d Padrón.
Es algo a lo que estamos ya acostumbrados, no debería de sorprender a nadie. Nosotros no somos los de los chistecitos o los vídeos haciendo mofas y payasadas, somos el SEVILLA FÚTBOL CLUB, ese que sin hacer mucho ruido da dolores de cabeza a más de uno, de los que para ganar la liga tienen que amañar partidos o comprar árbitros.
Los periodistas de ahora no son profesionales, no tienen respeto ni educación. Sólo hablan del Madrid, del Barcelona y del At. de Madrid. De los demás equipos no hablan ni quieren que ganen. Los jugadores que acompañan en los comentarios casi siempre son del Madrid, como Valdano, Rincón y otros que están a favor del poderoso. Y para colmo, los periodistas de provincias les ríen las gracias y no defienden a los equipos locales, para no enfrentarse a sus jefes de Madrid. Una vergüenza que estén de cachondeo cuando en el partido que comentan no juegan ninguno de los tres grandes para ellos. Cada vez somos más, los que queremos que pierdan cuando juegan la champion. Están de cachondeo y dicen de vez en cuando «nos hemos perdido algo «. Que falta de respeto al resto de las aficiones. Saludos cordiales.
Sobretodo a la del sevilla, que por mucho que intenten ignorarnos nos temen de cojones, y ya no te digo cuando escuchan ese pedazo de himno que les ponen los pelos como escarpias por más que no quieran, jajajaj, en sevilla hay que mori’ haaaayyy que mori’
Evaristo, gracias por tu comentario. En La Colina, siempre defenderemos con imparcialidad y objetividad los intereses del aficionado sevillista, exponiendo con veracidad y rigor la actualidad del Sevilla FC desde el punto crítico tan necesario hoy en día.
La visión de los señores de la capital de España es muy simple. Existe un bueno bonisimo que es el Madrid. Un malo malisimo que es el Barcelona. Y el representante de los humildes,(según ellos), es el Atletico de Madrid. Para ellos hablar de estos tres elementos resume la crónica deportiva. Los demás equipos cuando llegan al nivel de ellos son polizones molestos que osan compararse a tales señorias. Hay que ponerles a tales intrusos zancadillas miles por atrevidos. El mundo se cierra en ellos y nada más. Después viene la ignorancia mas supina de quién no quiere saber más. El creerse sabios e ignorar lo de alrededor los hace necios. Como observación cuando algún jugador, entrenador, etc. aparece por los equipos de Madrid se les borra el disco duro. Ya no pasó ni nació en ningún otro sitio. HA LLEGADO AL OLIMPO LLAMADO MADRID.
De acuerdo en todo contigo, Evaristo. Yo si vi el partido y aseguro que el gol anulado al Sevilla, a otros se lo dan como válido. A nosotros nos tienen un trato diferente, no somos reales ni llevamos corona, signo de patriotas, por mi parte se pueden ir a la mierda los de la prensa Nacional.
Buenisimo. Lo has bordado Eduardo. Pero sabes lo mejor? Que aunque no salgamos en las noticias, SI LES IMPORTA y mucho el SevillaFC. Otra cosa es, que les de mas o menos coraje escribir buenas noticias sobre nuestro equipo, pero importarles, vaya si les importa.