Tu periódico digital sobre el Sevilla Fútbol Club. Compartimos Afición

Rebelión

Certero y atinado como casi siempre, don Ramón Rodríguez Verdejo, a quien la mayoría conoce como Monchi, después del atraco que nuevamente sufrió el Sevilla Fútbol Club en el partido contra el Ladrón Madrí, al clamar a los cuatro vientos contra la prevaricación cometida por el árbitro del VAR. Ese sistema de vídeo que permite la revisión de las jugadas a cámara lenta y desde diferentes ópticas ha acabado con la coartada de los árbitros de apelar a la lógica del error humano cuando, en sus decisiones, han perjudicado a algún equipo. Esa excusa ya no cabe. Lo que cometió el árbitro que estaba ante la pantalla en el encuentro del domingo en el Santiago Bernábeu fue una prevaricación, ya que adoptó una decisión a sabiendas de que era injusta.

Quizá algún día alguien se harte y acuda a los tribunales ordinarios de justicia, porque no fue la única prevaricación que se perpetró en los campos de fútbol de primera división el pasado fin de semana. El rosario de atracos comenzó en el estadio del Villarreal con el estruendoso penalti cometido por Gerard Piqué al interrumpir con la mano un balón que iba directo a portería con claras opciones de convertirse en gol. Que no lo viera el árbitro del campo es posible pues la jugada en confusa desde algunas perspectivas.

Sin embargo, hay varias tomas de televisión que no dejan lugar a la duda ya que se aprecia claramente lo que realmente ocurrió. Es imposible que el árbitro del vídeo, o cualquier otro ser humano con sus capacidades visuales no mermadas, no aprecie el penalti, por lo que, si no lo pitó, es porque no quiso. Prevaricación, y robo al Villarreal, un equipo que aspira a ser candidato por más que esta temporada no haya arrancado en buenas condiciones.

El segundo atraco, cronológicamente hablando, se cometió el domingo en el partido Español-Real Sociedad teniendo como protagonista a Mateu Lahoz. El que dicen que es el mejor árbitro español anuló un gol al equipo vasco, rectificando incluso su propia decisión adoptada segundos antes, en una jugada en la que el balón le golpea. Según la norma, si el balón toca en el árbitro, éste debe parar la jugada salvo que el equipo que tenía la posesión de la pelota continúe con ella. Exactamente eso fue lo que ocurrió en dicho encuentro, y de hecho Mateu Lahoz hace una señal permitiendo que la Real Sociedad continuara la jugada. Sin embargo, al acabar en gol, el ínclito se desdice de su propia decisión y anula el tanto. Otro aspirante a candidato, perjudicado por una decisión arbitral.

El tercero de ellos fue el Sevilla Fútbol Club en la jugada mil veces ya comentada del penalti clamoroso del que fue objeto Ocampos, que podría haber supuesto un 1-2 a favor de los nuestros. En esta ocasión también hay mil imágenes que atestiguan y acreditan que existe una clara falta de Alaba al golpear al pie del argentino. Nuevamente el posible error del árbitro de campo de no ver la jugada queda resuelto por la que tenía que haber sido necesaria advertencia del árbitro de vídeo al observar las imágenes en las que queda bien clara la existencia de la infracción en el área madridista.

Nada de lo que se pueda decir al respecto de esta jugada es nuevo, como bien decía don Ramón. Esto se viene repitiendo desde tiempo inmemorial. Quien esto suscribe presenció el primer atraco del Ladrón Madrí al Sevilla Fútbol Club en el año 1972, concretamente el 16 de enero, en un partido que acabó 0-2 cuando se le escamoteó a nuestro equipo un penalti instantes antes de que los madridistas materializaran su segundo tanto en los últimos minutos del partido. En la crónica de ese encuentro publicada al día siguiente en el diario Abc ya se menciona la “indecencia” del arbitraje y su influencia en el resultado. Casi 50 años después dicha crónica sigue teniendo la misma vigencia.

Con todo, lo que el pasado fin de semana pone de manifiesto es cómo tres equipos que trabajan para engrosar algún día el grupo de los todopoderosos han sido torpedeados en sus aspiraciones. Sevilla Fútbol Club, Real Sociedad y Villarreal ya saben, por si no lo tenían claro, cómo se las gasta la mafia del para no modificar ni un ápice el reparto de las cuotas de poder que tienen establecido. Algún día se darán cuenta de que la inexistente solidaridad en el fútbol español es la única solución para urdir una rebelión que acabe con este status quo que corrompe una competición que debería ser deportiva y en buena lid, algo que disgusta sobremanera a El Padrino Florentino, como ya puso de manifiesto con su estúpido invento de la Súperliga.

Si algún día el fútbol español quiere ser limpio y honesto, deberá ser mediante una ‘rebelión de los aspirantes’.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

¿Te gusta La Colina de Nervión? Apóyanos

A partir de solo 1€ puedes apoyar al único periódico que te informa solo y exclusivamente sobre el Sevilla FC. Tu apoyo contribuye a proteger nuestra independencia y nos permitirá poder seguir ofreciendo un periodismo de calidad y abierto para todos los lectores. Cada aportación, sea grande o pequeña, es muy valiosa para nuestro futuro e irá destinada directamente a los componentes de la redacción de La Colina de Nervión.

¡Lo último!

Baraja advierte a la directiva

El mercado de fichajes se aproxima para un Valencia CF que viene dejando noticias positivas. Los de Rubén Baraja...

Antes de irte... mira esto:

Ads Blocker Image Powered by Code Help Pro

Bloqueador de anuncios detectado

Nuestro periódico vive principalmente de la publicidad y cada día podemos informarte gracias a los anuncios que se muestran. Sin embargo, parece que estás usando un bloqueador de anuncios. Por favor, permite que te mostremos anuncios o suscríbete a nuestro modo \"Sin publicidad\" por solo 0\'50€.