En los días previos a la Junta General de Accionistas, las noticias del Sevilla FC las protagonizan Pepe Castro y José María del Nido Benavente. El que fuera presidente de la entidad nervionense quiere volver a ocupar su anterior cargo. Para lograrlo está haciendo campaña por distintas peñas, mientras espera el permiso judicial para poder votar contra la gestión del actual Consejo. En la peña Sevillista de Carmona, Del Nido explicó sus ideas de futuro con el Ramón Sánchez-Pizjuán, Monchi y los americanos de 777 Partners.
Un nuevo Sánchez-Pizjuán en «tres años»
En primer lugar, José María Del Nido quiso pronunciarse acerca de las noticias que circulan sobre la posibilidad de construir un nuevo estadio para el Sevilla FC: «Hace tres años, porque lo estaba haciendo todo el mundo, dije que había que pegarle una ‘patá’ al Sánchez-Pizjuán. Dejarse de cambiar asientos, de poner luminarias, de embellecerlo por fuera, de echarle millones. Se le han echado 10-12 millones en los últimos años… Y vamos a hacer un estadio de 70.000 localidades. Aquí hay sevillistas viejos y se acordarán de un Sánchez-Pizjuán con cinco gradas de pie, donde cabían 70.800 personas. Y se llenaba. Por mí ya estaría inaugurado. Conmigo de presidente, en tres años estaría inaugurado. Ya sabéis el plazo que me doy para hacerlo. Un campo nuevo y lo estamos viendo al lado. Y no sólo al lado. La Real Sociedad, el Athletic de Bilbao, el Espanyol, el Madrid, el Villarreal, el Camp Nou se está tirando por fases, el Atlético de Madrid, el Betis… Nosotros éramos innovadores. Si le hubiéramos metido mano al estadio hace tres años, ya estaría terminado».
Un Monchi centrado solo en fichar para el Sevilla FC
También se refirió a las noticias que critican a Monchi por los últimos movimientos del Sevilla FC: «Si digo algo en contra de la gestión de Monchi salgo en todos los telediarios. Creo que no se le debieron dar las llaves de la entidad, es un gran error. A Monchi lo han quemado, se mete en toda las áreas, hasta tuvo que explicar la política de abonados. Zapatero a tus zapatos. Monchi conmigo volvería a ser el mejor director deportivo del mundo. No comprendo que de fichar casi siempre bien se pase a firmar siempre mal».
Noticias en el organigrama del Sevilla FC
Lo que José María Del Nido pretende si llega al poder es un gran cambio en todos los niveles: «La mayor parte de los altos ejecutivos de la entidad necesitan ser cambiados. Otra cosa es el personal. No sería bueno tampoco crear una inseguridad en la entidad. Muchas veces incluso cambiando de sitio a la gente que tienes se consiguen los objetivos pretendidos. El Sevilla que cogí era una quincalla. Con un grupo de elegidos le dimos la vuelta como un calcetín. No terminé el camino trazado por mis problemas personales. El Sevilla necesita modernizar de nuevo toda la estructura, no a un grupo de amigos o conocidos. Necesitamos bicharracos que quieran ganar un millón de euros pero que generen los ingresos que se necesitan. Suena feo que el consejo gané cuatro millones y que el presidente se embolse más de 800.000 euros, pero en la cuenta de pérdidas no es tan importante, lo mismo es más significativo gastarse 25 millones en Rony Lopes y pagarle cinco millones al año. Si tienes un presidente que ayude a ganar más dinero, no importa que tenga un sueldo«.
Los americanos, controlados
Para cerrar, Del Nido Benavente quiso dejar claro que tiene a los americanos controlados y que, con él como presidente, no habrá noticias sobre una venta del Sevilla FC: «Yo comparto la preocupación de una parte del Sevilla sobre el control de un paquete accionarial por parte de un capital extrajero. Recuerdo que yo no traje a los americanos. Tengo un acuerdo con ellos de que siempre tendré yo la presidencia y el doble de consejeros de ellos. Yo tengo previsto ocho consejeros en mi consejo, cuatro de mi total confianza, dos de los americanos, una de la familia Carrión y otro entre la familia Alés, Castro y Guijarro. Si hay empate, el voto del presidente desempata. Por tanto, el control sobre ellos es total, y hasta hoy han sido un socio fiel. En Inglaterra la mayoría de los clubes son de capital extranjero. Si vienen a aportar no pasa nada».