El joven extremo Bryan Gil no fue convocado por Pablo Machín con el resto de la plantilla del primer equipo nervionense para enfrentarse al Villarreal. Con esto, regresó al Sevilla Atlético la pasada jornada y propinó dos asistencias, además de provocar un penalti desaprovechado por Berrocal.
Alegría y desparpajo
La victoria 2-0 sobre la Real Balompédica Linense que propició tres puntos necesarios al Sevilla Atlético para alejarse del fantasma del descenso tiene mucho que agradecer a Bryan Gil. El internacional sub19, con sus 18 años y su desparpajo se está destapando como una de las nuevas joyas de la cantera, un auténtico diamante en bruto al que cuidar y mimar.
En la primera mitad, fue el asistente del gol de Chris Ramos y provocó un penalti haciendo uso de un juego gustoso y aplaudido. Caracoleó en el área rival poniendo las cosas muy difíciles a la defensa linense, que terminó derribando al canterano hispalense. El árbitro concedió la pena máxima al Sevilla Atlético, pero Juan Berrocal no supo aprovechar la oportunidad, lanzando demasiado alto el esférico. Ya en la segunda mitad, y tras varias internadas peligrosas por su banda izquierda, logró colgar un centro a balón parado para que Manu Sánchez hiciera el 2-0 definitivo.
Bryan, la clave
El extremo gaditano, desde que llegara con 10 años a la cantera sevillista, ya comenzaba a despuntar. Desde su llegada al Sevilla Atlético, suma 20 partidos y unos 1500 minutos. Esto le ha valido la posibilidad de anotar cuatro goles. Muchos de estos son claves, como el tanto que propició el empate frente al Marbella en el tiempo añadido (1-1).
El Sevilla lo necesita. En el primer equipo dio muestras de su calidad y en el filial es una pieza importante para lograr la victoria. De hecho, el filial sevillista no conoce victoria sin Bryan Gil desde noviembre de 2018 –frente al Jumilla-. Cuatro han sido los partidos que el barbateño se ha perdido con el Sevilla Atlético, donde el conjunto dirigido por Luci solo logró hacerse con un punto (tres derrotas y un empate).
Suspendido por acumulación
En la jornada número 25 de la Segunda División B, el joven atacante logró más cosas además de las dos asistencias: su quinta amarilla. Con esto, no podrá jugar el próximo partido ni con el filial ni con el cuadro dirigido por Machín.