Hay luz al final del túnel para Sergio Rico. El ex guardameta del Sevilla FC ha evolucionado en gran manera durante las últimas fechas y todo apunta a que es el turno de que afloren las buenas noticias. El optimismo en torno al futbolista del Paris Saint-Germain ha crecido gracias a la mejoría de la salud del mismo. De hecho, el hispalense apunta a ser dado de alta la tercera semana de agosto. Es más, la intención era que saliera incluso antes del hospital. Los médicos no descartan que Sergio Rico pueda jugar al fútbol de nuevo, aunque ahora mismo queda en segundo plano.
Buenas noticias en torno a Sergio Rico
Tras largas semanas después del accidente en caballo durante las fiestas del Rocío, Sergio Rico está más cerca que nunca de salir adelante. El que fuera portero del Sevilla FC entra en horas muy importantes debido a la cantidad de buenas noticias que está a punto de recibir. Según ha informado Guillermo Rai en The Athletic, el guardameta del PSG saldrá del hospital pasados el ecuador del mes de agosto. Tras tres meses después de la noticia del accidente, el futbolista ha evolucionado de manera notable y los doctores creen que podría haber tenido el alta incluso antes. Estos creen que el canterano nervionense estará capacitado para volver a los terrenos de juego siempre que la rehabilitación siga dando buenos resultados. Esto no es prioridad como tal, aunque estas noticias son agua de mayo para toda persona afín al ex guardameta del Sevilla FC.
La importancia de Sergio Rico en el Sevilla FC
Sergio Rico defendió la portería del Ramón Sánchez-Pizjuán durante cinco temporadas. El quinteño era una de las mejores noticias en la cantera hispalense y Unai Emery vio en el una alternativa más que interesante para competir con Beto. Desde el primer momento este demostró los reflejos que le habían llevado a convencer al entrenador vasco. En el recuerdo quedan alineaciones para la historia del club en las que Sergio fue protagonista, como la de la final de la UEFA Europa League en 2015. El canterano nervionense abandonó la disciplina hispalense en 2018, cuando Joaquín Caparrós quiso cambiar por completo el arco sevillista en su primer año como director de fútbol.