Esta temporada, las noticias en el ámbito deportivo están siendo bastante diferentes en el Valencia CF. Los pupilos de Rubén Baraja están inmersos en la pelea por el puesto de Conference League. Además, la permanencia (que era el principal objetivo) ya está conseguida. Sin embargo, la lucha del valencianismo no ha acabado. A pesar de que las cosas van bien en la clasificación, la afición che no olvida quién es su máximo enemigo. Se trata del máximo accionista de la entidad desde hace ya diez años: Peter Lim.
Una ilusión desvanecida pronto
Peter Lim se hizo con la propiedad del club valenciano en 2014. Por aquel entonces, las noticias para el Valencia CF eran bastante malas. La entidad tenía una deuda astronómica, y un nuevo estadio con las obras paralizadas desde hace cinco años. El magnate procedente de Singapur prometió acabar con los compromisos del equipo con los diferentes acreedores. Además, aseguró que acabaría las obras del campo para 2019. No obstante, la masa social valencianista pronto se dio cuenta que la llegada de Meriton Holdings (la empresa de la que es propietario Lim) iba a ser una de las peores noticias de la historia reciente del Valencia CF.
En la temporada 14/15, las noticias eran normales para el Valencia CF. El equipo se metió en la Champions League, algo normal para el equipo de la ciudad del Turia. Pero ya a partir del año siguiente las cosas empezaron a torcerse. Dos campeonatos seguidos más cerca de la zona de descenso que de puestos europeos hicieron ver que Peter Lim no era alguien de fiar. En 2017 tomó una de las pocas buenas decisiones en su etapa en Mestalla. Confió el equipo al binomio Mateu Alemany – Marcelino, y la plantilla disfrutó de una gran época, con título de Copa del Rey añadido. Sin embargo, en 2019 las noticias fueron pésimas para el Valencia CF y se rompió todo. La pandemia acabó por llevarse por delante a un plantel campeón y Lim dejó de invertir dinero, dejando al club con serio riesgo de descenso y desaparición.
Las prioridades valencianistas
En el próximo partido de LaLiga EA Sports, el Valencia recibe en Mestalla al Real Madrid. Vinicius vuelve al estadio donde recibió insultos racistas por parte de unos aficionados, que fueron expulsados inmediatamente. Pero la afición local tiene otras preocupaciones. Horas antes del comienzo del partido, habrá una manifestación cívica que comenzará en el centro de la ciudad, acabando justo delante del campo che. La masa social espera que esta expresión en contra de la propiedad traiga buenas noticias al Valencia CF y se dé cuenta que no le quieren dirigiendo los designios de su club ni un día más.
