Jornada de Liga realmente importante para el Sevilla. Tras certificar el pase para los octavos de Liga de Campeones, el conjunto nervionense vuelve a la competición liguera para seguir con la buena racha de resultados. Bien es cierto que la fiabilidad en el juego aún necesita de más tiempo, pero el siguiente rival requiere de un esfuerzo máximo, pues el Real Madrid necesita de una victoria para intentar engancharse a una Liga que se le escapa a cada jornada que pasa.
Nueve años
El conjunto merengue es uno de los que peor se le ha dado al Sevilla en los últimos tiempos. Se han conseguido victorias realmente heroicas como la del año pasado en el Sanchéz Pizjuán, pero también se han dado goleadas bastante dolorosas. Con todo ello, el equipo sevillista no gana en el Santiago Bernabeú desde la temporada 2008/2009. Desde ese partido, ocho derrotas consecutivas en feudo madridista. Unas cifras realmente importantes que el conjunto nervionense tratara de revertir.
El momento de dar un golpe sobre la mesa
El encuentro de esta jornada para ambos equipos es crucial. Para el equipo entrenado por Ernesto Marcucci es una prueba de nivel para vislumbrar a que puede aspirar esta plantilla. La racha de tres victorias consecutivas es muy positiva, pero podría resultar aún mejor con un triunfo ante el equipo de Zinedine Zidane, además de superarle en la tabla pues ambos equipos llegan empatados a 28 puntos.
Para el Real Madrid, por su parte, cada victoria es muy necesaria. Se sitúa cuarto clasificado, a ocho puntos de la cabeza de la tabla y con sería dudas en el su juego. El empate cosechado ante el Athletic de Bilbao fue una gran bala pérdida tras el pinchazo del Barcelona, por lo que el partido ante el Sevilla se antoja realmente importante, más aún jugando ante su afición.
Banega contra Isco
Parece que, poco a poco, Ever Banega va cogiendo galones en el juego del Sevilla. Buena prueba de ello fue su segunda parte ante el Liverpool donde dirigió gran parte de las operaciones. El mediocampista se encuentra cada vez más cómodo en el terreno de juego, además de sentirse más importante en el equipo. Tres goles y cuatro asistencias en todas las competiciones con el Sevilla demuestran como su relevancia en la plantilla sevillista es enorme.
Algo similar ocurre con Isco. El malagueño fue uno de los jugadores más destacados en el Real Madrid de la temporada pasada. Su esfuerzo en defensa y su creatividad en ataque marcaron las diferencias en numerosos partidos. En esta campaña, su inicio es muy parecido al de su equipo, siendo mucho más intermitente. Aún así, su aportación sigue siendo muy interesante con cuatro goles y cuatro asistencias, cifras casi idénticas a las de Banega.
Marcucci, ante su mayor reto
Las circunstancias en las que Ernesto Marcucci ha tenido que sentarse en la silla de entrenador del Sevilla no han sido las mejores. No obstante, su profesionalidad y calidad como técnico están saliendo a relucir. Tres partidos con dos victorias y un empate, además de lograr el pase a la siguiente ronda de Champions League. Ahora llega el encuentro más complicado en su corta etapa como primer entrenador, sin encontrar la mejor versión del equipo pero con una muy buena racha a sus espaldas.