El mercado de fichajes se aproxima y en el Sevilla FC se piensa que es el momento para volver a conseguir beneficios económicos. Tras una temporada con un importante receso y dos veranos sin los característicos grandes traspasos que han marcado el modelo nervionense, Monchi encabezará un verano movido en Nervión. Cinco grandes ventas podrían llenar, de nuevo, las arcas del Ramón Sánchez-Pizjuán en la vuelta al modelo de vender para crecer.
Una pareja cotizada
El Sevilla FC, cada vez que se aproxima el mercado de fichajes, se postula como uno de los favoritos para darle color al mercado. Sin embargo, el pasado verano se llevó a cabo una misión distinta: apostar duramente por la continuidad del grupo. Eso no salió barato. De hecho, el esfuerzo económico en Nervión fue muy importante, pero el rendimiento deportivo no estuvo a la altura. No es ningún secreto que en Nervión existen pérdidas, lo que ha provocado que Pepe Castro avise de que no temblará el pulso a la hora de vender jugadores.
En cuanto a ventas, el Sevilla FC cuenta con cinco jugadores que tendrán mucha expectación en el mercado de fichajes. El primero de ellos es Jules Koundé. El francés ya se ha dejado ver por Londres, donde está, presumiblemente, su destino favorito: el Chelsea. Obviamente Monchi no está en posición de forzar mucho a los londinenses, pero su venta parece casi asegurada en el entorno nervionense. Así pues, el Sevilla FC podría llegar a embolsarse unos 60-65 millones de euros, incluso más, por un jugador diferencial.
El próximo es la pareja de baile del francés. Diego Carlos ha firmado una temporada excepcional, consolidándose como el jugador con más minutos en la era Julen Lopetegui. En enero ya tuvo una oferta, que, seguro, se repetirá en el mercado de fichajes veraniego. El Sevilla FC lo ha renovado, pero no se ha oficializado. Por ello, la puerta continúa abierta a expensas de una propuesta económica irrechazable que provenga de la Premier League. Sin duda, esta sería muy cercana a la de Jules Koundé.
Más opciones para el Sevilla FC
Además de los dos bastiones de la defensa sevillista, Monchi cuenta en su haber con tres futbolistas más a los que no le faltarán novias. El primero de ellos acaba de hacer historia en el Sevilla FC: Yassine Bono. El marroquí se ha convertido en el primer Zamora de la entidad nervionense e, incluso, renovó en el tramo final de la temporada. Su cláusula de rescisión pasó a ser de 50 millones de euros, según informó Roberto Arrocha en ABC Sevilla. A pesar del elevado coste, el guardameta tendrá ofertas en el buzón, las cuales deberá de sopesar con un Sevilla FC que necesita vender en el mercado de fichajes.
Para terminar con las cinco grandes ventas que podría realizar el conjunto de Julen Lopetegui en verano, están dos argentinos. El primero, Marcos Acuña. El lateral ha demostrado un nivel excelso en la que, posiblemente, haya sido su mejor temporada en Nervión. En el Sevilla FC son conscientes de que va a tener ofertas en este mercado de fichajes y se llevará a cabo la misma filosofía: si llega una buena propuesta, vender. La cláusula tras su renovación subió y, aunque no ha trascendido la cuantía de la misma, se sitúa cerca a la de Yassine Bono. Sin duda, otro jugador que ha rentabilizado la inversión sevillista en él, la cual fue de unos diez millones de euros.
El segundo, Lucas Ocampos. El extremo argentino no ha mejorado sus números de la primera temporada en Nervión, pero sí ha evolucionado respecto a la segunda. Con nueve goles y seis asistencias ha hecho que Europa mire de nuevo hacia él. Es un caso similar al de Diego Carlos, pues pese a haber renovado, aún no se ha hecho oficial por diversas razones. Sin embargo, su cláusula se eleva hasta los 70 millones de euros, según GOAL. Si llega una gran oferta por Ocampos a Monchi no le temblará el pulso para aceptarla y firmar una total revolución en el Sevilla FC, el cual también necesitará fichajes.
3 comentarios
Venga!! Preparad los bolsillos socios accionistas, un buen verano os espera!!!
..ayyy que tiempos aquellos cuando se ingresaban en las arcas…
A llenarse los bolsillos, accionistas y Castro, que él es el primero que tiene que cobrar por no hacer nada, y traer desechos de tienta, con perdon, para que nos eliminen a la primera.
A llenarse los bolsillos, accionistas y Castro, que él es el primero que tiene que cobrar por no hacer nada, y traer desechos de tienta, con perdon, para que nos eliminen a la primera.