El Valencia ha recuperado la senda de la victoria. Después de tres encuentros sin ganar, los de Rubén Baraja batieron al Getafe en Mestalla con un tanto de Hugo Duro. Este triunfo les sirve para mantenerse en la pelea por Europa, al quedarse a dos puntos de la séptima plaza que ocupa el Betis. Si el Valencia CF quiere retener en el próximo mercado de fichajes a nombres como los de Giorgi Mamardashvili o Cristhian Mosquera, necesita jugar competiciones europeas para aumentar los ingresos del club. Aunque en el caso de ventas, seguro que recibirían una buena cantidad de dinero.
Problemas con el equilibrio
La pandemia del Covid-19 afectó a toda la sociedad, y el deporte no fue menos. Sobre todo en el fútbol, que es el que más dinero mueve en el mundo. Múltiples equipos aún siguen sufriendo las consecuencias. Es el caso del Valencia CF, que después de varios años con una fuerte inversión en fichajes, tuvo que echar el freno. Desde la temporada 20/21, el Valencia CF solo ha gastado treinta y cinco millones de euros en el mercado de fichajes. Contrasta bastante con, por ejemplo, la 18/19. Ese año, Peter Lim tiró la casa por la ventana e invirtió 129 millones en jugadores como Gonçalo Guedes, Geoffrey Kondogbia o Kevin Gameiro.
Con un gasto prácticamente nulo en fichajes, el Valencia CF ha tenido que reinventarse y confiar en los jóvenes. Desde la llegada del vallisoletano al banquillo che, esa ha sido la seña de identidad del equipo. Cristhian Mosquera, aunque ya había debutado años atrás, se ha asentado en el centro de la defensa, y hay varios grandes de Europa que le tienen en su lista. Pepelu, el único de los fichajes realizados por el Valencia CF en verano con un pago grande, es indiscutible en el centro del campo. Sin embargo, hay un profesional por encima de todos que puede llenar las arcas de la entidad de la ciudad del Turia.
Un fichaje bastante rentable
Giorgi Mamardashvili llegó al Valencia CF en el mercado de fichajes de 2021. El meta georgiano llegaba a préstamo desde el Dinamo Tbilisi por apenas doscientos mil euros. En principio iba a jugar en el filial, pero las lesiones le dieron una oportunidad en el primer equipo. Brilló con luz propia y el Valencia pagó 850.000 euros en invierno para hacerse con sus servicios de manera definitiva. Tres años después, es el portero menor de veintitrés años con mayor valoración de Europa, según la web especializada en traspasos Transfermarkt. Treinta millones de euros es el valor del de Georgia, superando a Anatoliy Trubin del Benfica, tasado en veinticinco. Por si acaso, los ches ya le están buscando sustituto, aunque tendrán la sartén por el mango en las negociaciones, ya que tiene contrato hasta 2029.
