La ciudad de Sevilla se vistió de gala para albergar una nueva y siempre apasionante entrega del gran derbi sevillano, y ya van 101 en Primera División. Así, Real Betis y Sevilla FC pugnaron por el dominio de la capital andaluza y por recuperar sensaciones, alentados por sus respectivas legiones (tras dos años de ausencia) en el graderío del Benito Villamarín. Este inmejorable contexto futbolístico dejó a su paso un más que esperado intenso choque, marcado por la expulsión de Guido Rodríguez, que acabó saldándose con un absoluto dominio sevillista y un imponente 0-2 en el marcador.
Control sevillista y expulsión bética en la primera mitad
Los primeros compases del derbi sevillano evidenciaron a un Sevilla FC bien plantado, que no tardó en implantar su dominio en la posesión frente al Real Betis. Este serio despliegue permitió a los hispalenses manejar los tiempos, saliendo victorioso en la mayoría de segundas jugadas y duelos individuales. Sin embargo, algo falto de mordiente, apenas logró incomodar en el área de Claudio Bravo durante la primera media hora. A partir de aquí el choque empezó a animarse en el plano ofensivo, sucediéndose una clara ocasión tras remate aéreo de Rakitic y un tanto anulado a Héctor Bellerín por fuera de juego. Además, Rafa Mir erró un remate a pase de la muerte ante la línea de gol.
Las mejores noticias posibles para el Sevilla FC llegarían al borde del descanso, materializadas en la expulsión de Guido Rodríguez. El pivote argentino vio la doble amarilla tras derribar a Rafa Mir en una peligrosa contra. En definitiva, un primer tiempo de control sevillista, en el que el Real Betis pagó el poco protagonismo que ejercieron sus dos faros atacantes, Fekir y Canales.
El Sevilla FC, imponente en el derbi sevillano
El inicio del segundo tiempo mostró a un Sevilla FC todavía más dominante en el derbi sevillano, frente a un Real Betis replegado atrás en inferioridad numérica. Pellegrini rearmó su esquema introduciendo a Carvalho por Willian José, relegando a Fekir como falso 9. En este contexto, el conjunto hispalense articuló varias llegadas serias sobre el área bética, hasta que logró iluminar el luminoso a los diez minutos, vía Marcos Acuña. El argentino armó un imponente disparo desde el pico del área tras una dejada perfecta de Ocampos, imparable para Bravo.
A partir de entonces, el Sevilla FC siguió martilleando al Real Betis desde ambos costados, principalmente desde internadas de Ocampos y Montiel. De este modo llegaría el segundo y definitivo tanto sevillista en el minuto 82. Este llegó fruto de un centro medido del lateral diestro que acabó siendo desviado por Bellerín hacia su propia portería. Esta acción acabó siendo válida para sentenciar el partido, que no mostró más sobresaltos.
Los goles del derbi sevillano
Marcos Acuña abrió la lata en el minuto 55. El argentino armó un potente zurdazo desde la frontal del área que acabó colándose por la escuadra izquierda de Bravo.
Bellerín, en propia puerta, hizo el segundo para el Sevilla FC en el minuto 82. El lateral bético remató desafortunadamente hacia su portería un centro servido por Montiel.
Chute anímico de cara al parón internacional
El Sevilla FC salió triunfante del Gran Derbi, con lo que ello supone. Desde el plano emocional, la escuadra de Julen Lopetegui logra revalidar su dominio sobre el fútbol sevillano. Igualmente, ha “maquillado” con creces una semana que empezó de la peor forma posible. Atendiendo al aspecto puramente deportivo, el Sevilla FC ha impuesto su ley frente a un rival directo por Europa. Esta realidad supone seguir sumando de 3 en la exigente carrera por la zona noble de LaLiga. Ahora toca dar paso al parón de selecciones, con la meta de recuperar efectivos y trabajar con los no internacionales de cara a la próxima parada del campeonato: la visita del Deportivo Alavés al Ramón Sánchez-Pizjuán.
