Pablo Machín está de moda. La gran temporada del técnico soriano con el recién ascendido Girona le abrió las puertas de un grande. El Sevilla FC apostó por él y, de momento, la jugada no ha podido salir mejor. La prestigiosa revista Panenka, especialista en grandes reportajes de fútbol, ha publicado uno en su web que analiza las claves del Sevilla de Machín.
Una idea flexible
Al principio de temporada, Pablo Machín intentó imponer en el club hispalense el mismo esquema que le hizo triunfar en tierras catalanas. Bastaron un par de jornadas para modificarlo. Panenka valora la flexibilidad del técnico sevillista, algo de lo que anteriores entrenadores que pasaron por el club hispalense, véase Sampaoli o Berizzo, carecieron. Machín no es un hombre que muere con sus ideas. Pese a que sí ha mantenido la defensa de tres y los dos carrileros ofensivos, Panenka explica varias diferencias. Entre ellas destacan que el Sevilla de Machín no es tan directo como el Girona y que éste no defiende tan atrás como sí lo hiciese en el club catalán. No obstante, Miguel Quintana, conocido periodista que redacta el reportaje, marca una fecha clave en ese cambio: el Ciutat de Valencia. En aquella goleada sevillista, Pablo Machín desechó el doble pivote que formaba Roque Mesa y Banega para dar entrada a Ben Yedder en la punta junto con el innegociable André. Ese nuevo 3-3-2-2 en apenas tres meses ha acabado con todas las dudas del técnico soriano.
Nombres propios
Los buenos resultados de la nave sevillista provienen de esas batallas individuales de las que habla Machín que al final se aúnan al colectivo. Mientras más batallas individuales ganas en el campo, más ventajas tiene el colectivo. El compromiso es la clave de este Sevilla, no obstante, Panenka ha destacado a dos hombres por encima de todos en este Sevilla de Machín. Ellos son Pablo Sarabia y Jesús Navas. A Pablo Sarabia lo catalogan como el factor “X”, lo ven como la pieza diferente del puzle sevillista. Y no les falta razón. El madrileño cosecha catorce goles y ocho asistencias esta temporada. En Panenka van más allá y alaban la virtud posicional de Sarabia, que permite la línea de pase de los mediocentros y así la ruptura por banda de los carrileros. El otro nombre clave es el de Jesús Navas. En la primera rueda de prensa del técnico soriano ya se deslumbró lo importante que sería el canterano sevillista para su esquema. A su gran capacidad ofensiva, añaden su seriedad y concentración atrás, reafirmándolo así como uno de los mejores laterales del fútbol español. Sin duda, dos de las piezas importantes que están cimentando a este Sevilla de Pablo Machín.