El Real Betis Balompié es uno de los equipos cuyo mercado de fichajes ha contentado más a los aficionados. Sin embargo, la afición verdiblanca tiene una espinita clavada con Raúl García De Haro. Estos tenían la esperanza de que Manuel Pellegrini confiara en el joven ariete para pelear el puesto junto con Borja Iglesias. El chileno no lo terminó de ver a sus órdenes y, finalmente, este se acabó marchando a Osasuna en busca de esa oportunidad tan ansiada en Primera División. Ahora, meses después, el tiempo le comienza a dar la razón a Pellegrini. El arranque de Raúl deja que desear.
El mercado de fichajes para Raúl García de Haro
Raúl García De Haro llegó a la pretemporada con el Real Betis convencido de poder contentar a Manuel Pellegrini y quedarse en la entidad verdiblanca tras el mercado de fichajes. Su veintena de goles el curso pasado con el Mirandés eran la credencial más valiosa para darle una oportunidad a un chico que demostró estar preparado para el salto. Este disputó sus minutos en pretemporada, sin mucho que contar y con la sensación de que le costaría aclimatarse a lo que Pellegrini le podía pedir. Fue entonces cuando su nombre empezó a salir en las noticias como una de las posibles ventas del Real Betis en el mercado de fichajes. Todas las partes dieron luz verde y el Alavés fue el primero en querer llevarse al nueve. Sin embargo, CA Osasuna irrumpió con fuerza en la negociación y acabó llevándose al jugador por una cifra cercana a siete millones de euros por el 65% del pase del jugador.
La situación del ex del Real Betis
De esa manera, Raúl García de Haro abandonó el Real Betis para firmar por CA Osasuna en el pasado mercado de fichajes. El catalán llegó a Pamplona para competir con Ante Budimir por ser el nueve titular de un equipo con opciones a jugar Europa esta temporada. Ya no es que esto no se consiguiera, que también. La realidad es que a Raúl le está costando lo suyo hacerse a Pamplona y a CA Osasuna. Este ha disputado 268 minutos como rojillo repartido en ocho encuentros, siete de LaLiga y uno de previa a la Conference ante el Brujas. Eso sí, no ha jugado aún noventa minutos desde que se pusiese a las órdenes de Jagoba Arrasate. De la misma manera, todavía no ha goleado ni asistido. Al ex del Mirandés le está costando hacerse un hueco en el once y amoldarse a su equipo. La sensación es que Ante Budimir, Arnáiz o el Chimy Ávila están mucho más preparados que este para ser el nueve de CA Osasuna. Queda demasiada temporada por delante, aunque eso sí, muchos están empezando a entender por qué a Pellegrini no le parecía una tragedia el hecho de desprenderse de el.