El pasado domingo, el Sevilla FC volvió a pinchar. Esta vez, ante el Celta de Vigo en Balaídos. Situación preocupante la del equipo de Lopetegui, que ve cómo le acechan los fantasmas de la caída en picado en la segunda vuelta liguera que se vienen repitiendo desde hace un par de temporadas.
Sevilla FC, ‘el resucitador’
Real Madrid, SD Eibar, Valencia y ahora Celta de Vigo. Ésta es la lista de rivales que se han enfrentado en horas bajas y con necesidad de sumar al Sevilla y han salido reforzados al término de los noventa minutos. Hecho más que negativo para el conjunto sevillista, que, inexplicablemente, se deja puntos contra todo pronóstico frente a adversarios que se encuentran en el peor momento en LaLiga. Entre la afición nervionense siguen creciendo las dudas sobre el juego. Además, los sevillistas vuelven a sentir la misma sensación que en la pasada campaña, tirar la temporada en la segunda vuelta.
Momento clave
La derrota del Sevilla FC ante el Celta en tierras gallegas llega en un momento decisivo. Atlético de Madrid, Getafe, Real Sociedad… Cada vez son más los equipos que se suman a la lucha por la tercera y cuarta plaza y los pinchazos a estas alturas pueden costar muy caro. Pese a haber caído en Copa del Rey, precisamente resultado de esta dinámica negativa, el mes de febrero ya ha llegado y eso significa que se acerca la Europa League, competición que siempre ilusiona al sevillismo. Por lo tanto, es necesario volver a reencontrarse con las buenas sensaciones para evitar sorpresas, como pasó en la pasada edición de dicho campeonato.
Hora de cambiar
Una semana tiene la plantilla hispalense para reponerse del golpe recibido en la última jornada disputada. El próximo domingo hay una nueva cita liguera y el Espanyol, también en apuros, visita el Ramón Sánchez Pizjuán. Una oportunidad en casa para cortar esa mala racha que arrastra el cuadro andaluz desde el inicio de año.