Por tercer año consecutivo, el Sevilla estará en la disputa por ganar la Europa League. El premio de regresar de nuevo a la máxima competición europea es tentador y puede conseguirse por dos caminos: vía Liga o vía Europa League, el gran dilema.
Otro año más, y ya van tres seguidos, el Sevilla es máximo aspirante a conseguir un título en Europa. El trofeo estará caro, pues Tottenham, Dortmund, Liverpool, Manchester United y otros equipos aspiran a ella. Grandes del viejo continente que no pondrán barata la obtención de la denominada «Champions Naranja», cuyos emparejamientos de octavos pueden verificarlo. El Sevilla por su parte, ha tenido fortuna en el sorteo, jugando contra dos rivales que, sobre el papel, son más humildes. A pesar de ello, el conjunto de Unai cosechó una derrota en Noruega ante el Molde. Ahora toca el Basilea, el campo de la final.
En Liga más de lo mismo, el Pizjuán es un fortín y fuera de él parecen salir los jugadores con miedo. La afición lleva pidiendo mucho tiempo un cambio de actitud que no llega, hace bastante que saltaron las alarmas. Marchan quintos clasificados y si no empiezan a ganar fuera, Athletic y Celta van pisando fuerte. El Villarreal está tranquilo, más cerca del Madrid (tercer clasificado), que del Sevilla. La próxima cita será entre el submarino amarillo y los nervionenes, en el feudo rojiblanco en el que tantos rivales de peso han caído. Buena oportunidad para dar un golpe sobre la mesa y acercarse a la cuarta posición.
Ahora vienen los dilemas. A estas alturas de la temporada, cuando quedan diez partidos ligueros, el Sevilla solo tiene que disputar cinco en casa: quince puntos máximo. Fuera de casa la afición no cuenta los puntos, si llegan tres puntos desde fuera de Nervión, estallarían como locos, pero no hay grandes esperanzas. Con estos pronósticos es difícil alcanzar al Villarreal, que este año funciona como un tren de alta velocidad. ¿La otra solución? Ganar la Europa League por tercer año consecutivo. Muy difícil, pero no imposible. El inconveniente llega, cuando el Sevilla tenga que visitar Anfield, Old Trafford, Signal Iduna Park o el mismo Madrigal, donde perdieron 2-1 esta temporada.
Sin ganar fuera de casa es muy complicado cualquiera de los objetivos. Superar eliminatorias es posible, pero cuando se trata de ir sumando puntos, la cosa cambia. Las aspiraciones de regresar a la Champions de nuevo, un equipo competitivo y las posibilidades de conseguirlo, están. Ahora queda ver como se desarrolla lo que queda de temporada. Por ahora, jugamos en Basilea y días después nos medimos al Villarreal, se pueden dar dos golpes encima de la mesa.
Muy bueno ?