Partidazo el que presenció el Puskás Arena. El Sevilla Fútbol Club cayó de pie ante el coloso Bayern de Múnich. Se escapó la oportunidad de sumar la segunda Supercopa de Europa a las vitrinas del Ramón Sánchez-Pizjuán. Del increíble esfuerzo realizado por los hombres de Julen Lopetegui se pueden sacar algunas conclusiones. La temporada que recién ha comenzado es, cuanto menos, ilusionante. Sin embargo, existen ciertos detalles dentro del plantel que pueden marcar el devenir de la campaña y que se han dejado ver en Budapest.
Bajas sensibles del Sevilla Fútbol Club
Ante el Bayern, la escuadra andaluza demostró que mantiene sus señas de identidad intactas. Sigue siendo un grupo compacto y fuerte que da la cara hasta el último minuto y que juega bien al fútbol. No obstante, se resintió de las bajas que ha sufrido en este mercado estival. La salida de Banega ha mermado un centro del campo destinado a ser comandado por Ivan Rakitic. El croata aún no ha alcanzado el nivel físico y táctico del resto de la plantilla y el equipo lo notó. Partido discreto del centrocampista, que distribuyó poco juego y que pocas veces tocó el esférico, pero que cuya máxima aportación fue sufrir la falta que provocó el penalti y el gol del Sevilla. Por otro lado, Escudero completó un partido bastante flojo. Reguilón dejó el listón alto en el lateral izquierdo y eso lo notó todo el que vio este partido. Escudero no da la talla y, a la espera de que Acuña pueda demostrar su valía, la posición de lateral izquierdo es más débil que la pasada temporada.
El fondo de armario que pidió Julen
Algo que se puede sacar en claro de esta final es la falta que hace tener un plan B de nivel en el banquillo. Ante el Bayern, los jugadores sufrieron secuelas del gran esfuerzo realizado, viniendo bien algunos cambios para reparar ese problema. De ahora en adelante, el Sevilla FC afronta tres competiciones exigentes, lo que supone no poder bajar el nivel en muchos meses y con el desgaste físico que ello conlleva. Así, y como solicitó días atrás Julen Lopetegui, el equipo requiere refuerzos, lo que lleva a la necesidad de realizar fichajes antes de la finalización del mercado.
El Sevilla Fútbol Club, sin killer
Todos los sevillistas se percataron de la importancia de tener un finalizador nato entre sus filas. Las dos ocasiones desperdiciadas por En-Nesyri sacaron a relucir esa carencia que sufre el equipo y de la que se ha sabido sobreponer la pasada temporada. Aún así, el Sevilla Fútbol Club se empieza a mover en una élite en la que, sin ese rematador, sus posibilidades se ven muy reducidas. De Jong, que tiene otras buenas cualidades, tampoco muestra esa característica que todo plantel TOP necesita para mantenerse en lo más alto.
El nivel de Suso
El encuentro en Budapest dejó cuestionado al gaditano. El rendimiento mostrado a lo largo del choque no fue precisamente el mejor. A la falta de presión e intensidad en algunos momentos acompañaron varias pérdidas de balón que echaron por tierra posibilidades de montar una ofensiva. Además, no mostró signos de poder desbordar a la zaga bávara. Muy por debajo de las expectativas un futbolista por el que el Sevilla FC invirtió 21 millones de euros este verano por aquella opción de compra obligatoria.
Lopetegui, de seguro, habrá sacado también sus propias conclusiones. En pocas horas inicia su andadura en La Liga un Sevilla que promete guerra, pero que debe limar esos pequeños detalles para estar en lo más alto.
Pero porqué **** no se le da la oportunidad a carlos fernandez, en mi opinion es mejor que los dos titulares, si lo venden nos vamos a arrepentir y mucho