El caso Vitolo aún no ha terminado y el culebrón del verano se puede alargar si el Sevilla FC decide denunciar al Atlético ante la FIFA. El máximo organismo del fútbol internacional no entrará por si solo a investigar el traspaso del canario, pero si el club sevillista considerara oportuno denunciar sí lo haría.
El primer paso que el Sevilla puede dar es demostrar la validez del acuerdo de renovación que José Castro anunció hace unos días. Según el máximo mandatario sevillista, el pacto alcanzado para la continuidad de Vitolo subiría su cláusula de rescisión a los cincuenta millones de euros. El acuerdo firmado supuestamente por su padre y sus representantes elevaría la cantidad depositada en la Liga de Fútbol Profesional. La validez de ese contrato se demostraría en la potestad o poder que tenga su padre de manera legal para firmar en su nombre.
Contrato por duplicado
De demostrarse que su padre tiene capacidad legal para firmar el acuerdo el Atlético de Madrid, debería abonar la cantidad restante de quince millones hasta alcanzar los cincuenta estipulados. Esta cantidad debería pagarse siempre que se demuestre la validez de la renovación de Vitolo con el conjunto de Nervión hasta 2022. Se encontraría la FIFA ante la investigación de una duplicidad en los contratos del canario, al haber firmado a posteriori el acuerdo con la UD Las Palmas y Atlético de Madrid.
José Castró declaró que cuenta con mensajes que demuestran que Vitolo estaría de acuerdo con la renovación. Estos mensajes pueden poner de manifiesto la implicación del jugador por continuar siendo en el equipo hispalense.
Incumplimiento de la sanción
La primera consecuencia que puede tener el Atlético de Madrid es por el incumplimiento de la sanción que el TAS impuso al conjunto colchonero, la cual le prohíbe traspasar hasta enero de 2018. La FIFA considera el fichaje de Vitolo como un traspaso, aunque se haya abonado la cláusula de rescisión del jugador canario. Esto ya ocurrió en 2012 cuando el Atlético Osasuna con el traspaso de Javi Martínez, cuando el club rojillo reclamó el porcentaje por la formación del internacional. En este caso, el organismo internacional consideró el fichaje de Martínez por el Bayern de Múnich como un traspaso, pese a haberse llevado a cabo por el pago de la cláusula de rescisión de 40 millones.
El culebrón del verano aún no ha terminado y si el Sevilla FC decide tomar acciones legales contra Vitolo y el Atlético de Madrid, las consecuencias pueden llevar a una batalla legal ante la FIFA con consecuencias muy graves.