Llegó un nuevo jueves mágico a Nervión, otra semifinal europea, y ya van tres seguidas. El Sevilla FC tenía un último obstáculo que saltar antes de disputar la ansiada final de la Europa League, la tercera consecutiva, la quinta en su historia. Porque sí, otra vez, los hispalenses van a aspirar a ser campeones de su más preciado trofeo, como algunos la llaman, el «paragüero», la niña bonita de los sevillistas, ya que hoy se ha confirmado la presencia, una vez más, en la final del próximo 18 de mayo en Basilea.
El conjunto de Emery llegaba a este encuentro tras un partido de ida que acabó con un empate a dos, que dejaba la eliminatoria al 50%, pero que obligaba al Shakhtar a ganar o empatar con más de dos goles. El Ramón Sánchez Pizjuán estaba engalanado para la ocasión: las banderas ondeaban al viento y el cielo parecía dar un descanso al comenzar el encuentro con una presión impresionante del estadio sobre los jugadores ucranios cada vez que tocaban el balón. Esa presión por parte del público y la concentración de los de Unai se convertiría en gol tras una recuperación de balón de Gameiro, que definiría con la clase que tanto representa al francés, en el 8′ de la primera parte. El Sevilla pondría el primer gol en el marcador, obligando al equipo ucraniano a marcar dos goles si querían pasar a la final. A partir del gol, el Sevilla se relajó y el conjunto de Lucescu se fue hacia arriba pero sin generar ningún peligro. En el minuto 44, y tras una mano en el área que pedían los sevillistas, los ucranianos empataron con un gol en una contra muy bien llevada y finiquitada por Eduardo. Con ese empate a 1 acabaría la primera parte; sabor agridulce después de un primer tiempo en el que fue superior el Sevilla FC.
La segunda parte comenzó con un público enchufado y pidiendo a sus jugadores que le echaran huevos, pero los que atacaron primero fueron los ucranianos con el tiro de Kovalenko, que no le serviría de nada ya que en la contra siguiente, Gameiro, otra vez, la metería entre los tres palos para poner el segundo en el marcador y anotar el tanto número 28 en la temporada. En el minuto 58, Mariano cogió el balón en la frontal y con un tiro ajustado al palo metió un golazo que ponía el tres a uno en el marcador, dejando casi sentenciada la eliminatoria. Ocasión muy clara del Shakhtar con un cabezazo que se marchó muy cerca del poste. Lucescu metió a Bernard con la intención de darle más verticalidad y buscar a la desesperada los dos goles que le darían el pase. En el 80′, el Ramón Sánchez Pizjuán se puso en pie tras una enorme galopada de Kevin Gameiro hasta el área sevillista para robar el balón. Tras eso, Emery le sustituyó, provocando una sonora ovación. El galo, tanto en la ida como en esta vuelta, ha conseguido meter él solito al Sevilla FC en la final de la Europa League por tercera vez consecutiva.
En el minuto 93, el Ramón Sánchez Pizjuán explotó en júbilo tras el pitido final que confirmaba el pase a la final del Sevilla FC tras un partidazo. En Basilea esperará el Liverpool, que será el último obstáculo para conseguir la quinta Europa League, tercera consecutiva.
FICHA DEL PARTIDO
Sevilla FC (3): Soria, Mariano, Carriço, Rami, Trémoulinas (sustituido por Escudero en el 72′), Krychowiak, N’Zonzi, Banega (sustituido por Cristóforo en el 88′), Coke, Vitolo y Gameiro (sustituido por Iborra en el 82′)
Shakhtar Donetsk (1): Pyatov, Kucher, Rakitskiy, Ismaily, Srna,Malyshev, Stepanenko, Taison (sustituido por Bernard en el 75′), Marlos (sustituido por Wellingtonen el 83′), Kovalenko, Eduardo.
Goles: Gol de Kevin Gameiro en el minuto 8′. Gol de Eduardo en el minuto 44′. Gol de Gameiro en el minuto 49′. Gol de Mariano en el minuto 58.
Colegiado: Bjorn Kuipers. Mostró amarilla a Banega por parte del Sevilla FC. Por parte del Shakhtar, amonestó a Kucher, Marlos, Kakitskiy, Eduardo, Srna, Stepanenko.
Incidencias: Partido de vuelta de la semifinal de la Uefa Europa League celebrado en el Ramón Sánchez Pizjuán tras colgarse el cartel de «no hay entradas».