El técnico sevillista compadeció en rueda de prensa tras finalizar el encuentro en el Sánchez Pizjuán. “La experiencia nos ha dado saber competir en cada momento, cuando un equipo como el Celta te presiona, se despliega para mostrar sus virtudes, el portero para el penalti, puede haber un momento de duda, pero hay que saber gestionar las emociones, seguir manteniendo la estabilidad emocional y la credibilidad, y supimos reponernos pronto ante las dudas. Técnica tiene Gameiro de sobre y lo ha demostrado con creces. Es importante mantener una línea estable y de solidez en tu estado emocional, y el equipo sí lo ha sabido estar presente” – anañizó Unai.
El triunfo ante el Celta de Vigo fue gracias a la capacidad del equipo, a la ilusión y las ganas: “los jugadores estaban muy motivados. Hemos aludido mucho a que los sevillistas han encontrado en esta competición su felicidad y por ellos hay que pelearla. Pensamos solo en la semifinal porque el éxito final es muy bonito, pero éxito está en el camino”.
También, aunque rebosante de felicidad, puso los pies en el suelo: “No podemos escaparnos de la alegría del momento, es un bonito resultado, pero vamos a ser prudentes y a darle continuidad en la vuelta. Recordamos la capacidad de respuesta del Celta que llegó a ganar al Barça 4-1, no lo digo por decir. Estoy satisfecho porque hemos hecho un partido muy completo, nuestras mejoras nos dan el rendimiento necesario para ampliar la ilusión, como hoy, en nuestro estadio con nuestra afición. La Copa está siendo bonita, pero nos faltan 90 minutos y fuera de casa, nos faltan cosas por hacer. Tenemos el resultado a nuestro favor, pero querrán encontrar su momento, tendrán sus bazas y tenemos que estar preparados para ellos”.
Y como siempre, no se olvidó del jugador doce del partido, la afición y la gran importancia que tienen en los encuentros: “El fútbol es un juego muy serio, desde la idea de grupo importante, vamos dando pasos, en el Sánchez Pizjuán todavía recordamos que los inicios fueron difíciles, pero es nuestro santuario y esa química nos da fuera y queremos sacar a relucir lo mejor de nosotros y trabajar fuera de casa, encontrar una línea más regular de credibilidad que los objetivos vengan con resultados. El camino es estar todos juntos con los jugadores, ése es el camino, cuando me silban intento estar firme y cuando me aplauden, también. Los que tienen que sentirse con confianza y cómodos son los jugadores”.