No está teniendo suerte el Sevilla en los primeros partidos oficiales de la temporada. A las sanciones de Carriço y Kolo se han sumado las bajas de Nico Pareja, David Soria, Escudero y la del internacional francés Rami. También hay que recordar la lesión de Tremoulinas, que sigue sin entrenarse con sus compañeros. Esta cantidad de bajas en la retaguardia del equipo dará protagonismo a Diego González en la Supercopa de España.
Así es Diego González
El gaditano le pega con precisión y potencia con las dos piernas por igual, mide 1,85 y va muy bien de cabeza. “Es veloz, en el cuerpo a cuerpo siempre gana. Golpea al balón con los dos pies, cualidad que maneja como he visto a pocos. Técnicamente no tiene ningún problema. Hacía tiempo que no veía a un futbolista tan completo, su futuro es bestial”. Así lo describía Francisco López Alfaro. El ex futbolista del Sevilla desempeña una de las áreas más delicadas del Sevilla, la de tecnificación, que está dando fantásticos resultados.
Diego González (21 años) está llamado a ser una de las estrellas que en poco tiempo alumbre nuestro fútbol. Es el prototipo perfecto del futbolista del siglo XXI. Sube al ataque con calidad y es peligroso en las jugadas a balón parado por su poderío aéreo. Lo mismo hace goles, que se convierte en un muro infranqueable para el rival. Eso sí, siempre bajando la pelota al suelo y siempre queriendo jugarla.
“Me gusta atacar. De chico jugué de extremo y tengo tendencia a irme arriba cada vez que puedo. Yo juego donde me pongan, me da lo mismo. Lo importante es poder ayudar al equipo”, afirma el propio jugador sobre sus características.
Trayectoria deportiva
Jugaba en el APA Sancti Petri de Chiclana hasta que, en edad de cadete, fue fichado por el Cádiz. Tenía solo 16 años y ya destacaba por encima del resto hasta el punto de ser llamado por el Liverpool, cuyos técnicos lo invitaron a pasar unos días en Melwood, la ciudad deportiva del equipo ‘red’, en West Derby. Sin embargo, se topó con la negativa de la antigua directiva del Cádiz. Entonces, pasó al Cádiz B. De allí, unos meses en calidad de cedido en el Granada B, hasta que en julio de 2015 Monchi lo trajo al Sevilla Atlético. El conjunto de Nervión pagó 200.000 euros por su traspaso. «Era una oferta que no podíamos rechazar”, comentaba el director deportivo del Cádiz, Jorge Cordero.
Ese mismo verano llamó la atención de Unai Emery en un partidillo preparatorio, disputado entre el primer equipo y el filial, para la Supercopa de Europa. Lo incluyó en la lista del Sevilla para jugar en Tiflis, Georgia, contra el Barcelona. “Cuando me dijeron que estaba en la lista, creí que los compañeros me estaban vacilando como novato que era. Pero era verdad. Imagínese el subidón”, declaró entonces el propio jugador.
Su etapa con el filial
Ha sido pieza fundamental en el ascenso a la división de plata del equipo de Diego Martínez. Durante la temporada pasada, disputó 38 partidos con el filial, marcando 3 goles y dando 5 asistencias. «El ascenso ha significado mucho para todos, creíamos en una idea y la hemos defendido hasta el final». Diego González, junto a Ivi y Borja Lasso, ha tenido un papel destacado en la exitosa campaña que ha realizado el Sevilla Atlético.
Con el primer equipo
Debutó en diciembre de 2015, jugando los 90 minutos del partido de Copa del Rey entre el Logroñes y el Sevilla. El pasado 8 de mayo disputó sus primeros minutos con la elástica del Sevilla en Liga. Saltó al terreno de juego en el minuto 73, sustituyendo a Juan Muñoz. A los 20 segundos de haber entrado anotó el gol sevillista de tacón. Una semana más tarde, jugó los 90 minutos del partido de Liga disputado en San Mamés.
Jorge Sampaoli ya ha contado con el jugador durante la pretemporada. Cuestionado sobre la posibilidad de permanecer en el primer equipo, Diego respondió lo siguiente: “Yo soy realista y siempre estoy ahí para ayudar en lo que pueda. Primero con el Sevilla Atlético, cuya pasada experiencia me ayudó a madurar. ¿El primer equipo? Ojalá, trabajando se llega lejos”.
Ahora le llega la oportunidad de jugar su primera final como profesional defendiendo el escudo del Sevilla. Frente a los de Sampaoli, el FC Barcelona de los Messi, Rakitic, Suárez y compañía.