El Ramón Sánchez-Pizjuán, con el año 1890 reflejado en su grada de fondo, acogió el partido entre el Sevilla FC y el Real Valladolid, correspondiente a la decimocuarta jornada de Liga. Los de Julen Lopetegui llegaban casi con la obligación de sumar los tres puntos en casa, frente a un equipo que pone las cosas difíciles y que al final sacó un empate. Volvió Jesús Navas a un once que contó también con Óliver Torres, dando descanso a Joan Jordán. Por su parte, Sergio González dispuso sobre el verde un 4-4-2 con Roque Mesa y Fede San Emeterio, dos conocidos en la capital andaluza.
Dominio y gol
El dominio sevillista de los primeros minutos se encontró el muro vallisoletano en zona de tres cuartos hasta el minuto 11, cuando Ocampos encaró en mano a mano a Masip e intentó una vaselina que escupió el larguero. El Sevilla FC se hizo con el control del partido y generaba peligro, en especial por medio de Lucas Ocampos. La velocidad del argentino puso en aprietos a la zaga rival. Al cabo de la media hora, fue el internacional argentino el que transformó un penalti que puso por delante a los suyos. Encontró el premio del gol al fin un Ocampos que necesitaba marcar como agua de mayo. Comenzó en ese momento un intento de reacción por parte de los visitantes, con un primer disparo a puerta de Raúl Carnero en un libre directo. Su presencia empezó a notarse cada vez más en las cercanías de Bono ante un Sevilla FC que retrocedió unos metros. Pese al cambio de tendencia, los 22 futbolistas se fueron a vestuarios con la diferencia favorable a los andaluces.
Se escapó la victoria
Arrancó la segunda mitad más equilibrada en juego. Los de Pucela mostraron entereza mental y se lanzaron a por el empate. Transcurridos cinco minutos, un taconazo de Marcos André se estrelló en el palo para susto del conjunto local. Ante la insistencia del Valladolid, Julen Lopetegui comenzó su carrusel de cambios. Trató de recuperar el dominio de la medular con Jordán. Poco a poco, el Sevilla FC retomó el pulso del partido. Sin embargo, no retrocedía el bloque de Sergio González, que siguió visitando el área hispalense. Especulaban los rojiblancos, cada vez más atrás empujados por los pucelanos. Tantas arremetidas se tradujeron en un empate que dejó fríos a los locales. Con ese resultado llegó el final.
Los goles del Sevilla FC – Valladolid
1-0, minuto 31. El colegiado señaló la pena máxima por una mano de Fede San Emeterio en área visitante. Lucas Ocampos fue el encargado de ejecutarla, con un disparo raso a la izquierda del guardameta, que se tiró al lado contrario engañado por el argentino.
1-1, minuto 87. Raúl Carnero, en una arremetida del Valladolid, soltó un latigazo que coló por la escuadra derecha de Bono, para arrebatar dos puntos a un Sevilla FC de más a menos.
Partido irregular del Sevilla FC
El partido deparó la mejor noticia que podía recibir el Sevilla FC: Ocampos volvió a mostrar un nivel muy alto. Luchador como siempre, pero esta vez con esa chispa y precisión que le caracterizan. Convirtió con firmeza el penalti y comandó el ataque sevillista. Sorprendió el cambio que lo mandó al banquillo. Por su parte, Acuña se sintió cómodo en el lateral izquierdo y Koundé, imponente como siempre. La parte negativa, el conformismo del Sevilla FC, que no fue a por el segundo tanto. De nuevo, Lopetegui apostó por el 1-0 y acabó lamentándolo. El equipo retrocedió y el latigazo de Carnero consumó los peores presagios. Un gol cuya llegada se percibía. Volaron dos puntos por no ser valientes y buscar una ventaja más amplia.