Como acostumbra la entidad sevillista, tras la presentación del francés Maxime Gonalons, el centro de atención fueron Pepe Castro y Joaquín Caparrós. Ambos se mostraron muy satisfechos con el trabajo realizado desde la dirección deportiva. Pero fue Castro quien dijo que «siempre dije que quería gente doliente en la dirección deportiva y estoy contento desde el principio, porque veo trabajar a la gente con auge y ansia de ir a por todo”.
Así también elogió a todos los que trabajan en la dirección alabando que hayan preferido quedarse en la entidad. “Veo a Gallardo trabajar a diario incansablemente o a un mundialista como Carlos Marchena, que está porque quiere estar. Ha tenido ofertas ganando cinco veces lo que gana aquí y ha preferido ser serio con su presidente y con su club y continuar en el proyecto. Pablo Blanco, Antonio Álvarez en la Escuela de Fútbol… son los nuestros y los que nos dicen lo que tenemos que hacer. El Consejo está para aportar las posibilidades económicas cuándo, cómo y con quién ellos digan porque son los entendidos» aseguró el presidente, a lo que añadió «que el director de fútbol esté contento es normal, porque estamos haciendo las cosas a nuestra manera, en el momento adecuado y sin presiones”.
Nuevas incorporaciones
Asimismo al ser preguntado por otro fichaje importante no descartó nada. «No sé si vendrá un pelotazo o no, pero en los últimos días siempre salen opciones y estamos atentos, con la ventaja de que nosotros tenemos ese espacio económico, como se denomina ahora, que otros no tienen». La última intervención de Pepe Castro fue en referencia a Pablo Sarabia, con quien “seguimos hablando. Él quiere quedarse y nosotros que se quede. Es momento de olvidarse del tema, que el futbolista siga centrado en jugar bien y marcar muchos goles».