Carlos Fernández y Mudo Vázquez, en la rampa de salida

A una semana de la ventana de fichajes invernal, el Sevilla FC parece tener muy claro los movimientos que, al menos, quiere intentar llevar acabo. Así como Julen Lopetegui está siendo transparente en cuanto a cuál es su esquema básico de trabajo y las cartas en las que confía para el fondo de armario, de igual manera ha puesto de manifiesto con quién no cuenta y cuáles son los huecos a reforzar. De este último grupo son Carlos Fernández y Franco Vázquez, dos futbolistas con historias muy dispares en el club nervionense, pero cuyas marchas en enero podrían valer de punto en común para dos atacantes que quieren rascar más bola.

Carlos Fernández, camino de otro desengaño

Para el de Castilleja de Guzmán, una vez más, las aspiraciones de triunfar en el Sánchez-Pizjuán se frustran mientras observa cómo pasan las oportunidades sentado en el banquillo. Tras sus 14 dianas el curso pasado, vitales para la clasificación europea del Granada, parecía que el canterano, con el deseo de Lopetegui por contar con tres delanteros, tendría en este curso esa ocasión por la que tanto ha tenido que pelear fuera. Sin embargo, con 192 minutos en 7 partidos, y con el casillero de goles a cero, Carlos Fernández quiere y necesita jugar más. Y, a día de hoy, su solución parece por estar, otra vez, lejos de Nervión.

Su contrato hasta verano de 2022 supone para el Sevilla FC un margen más amplio que con el argentino en el mercado de fichajes. La temporada pasada, demostró que puede desenvolverse con solvencia y goles en una Primera División española en la que militan equipos interesados como el Celta o el Valladolid, además de un Granada que volverá a buscar su retorno. Por su parte, los vigueses ya intentaron hacerse con él en verano, pero los 15 millones que pedían desde Sevilla y la competencia contra equipos como el Benfica o la Real Sociedad, significaron la retirada de una operación a la que estarían dispuestos a volver debido a la devaluación que está sufriendo el jugador ante la falta de minutos y el deseo del Sevilla de ver subir de nuevo su valor.

El Mudo, de más a nada en el Sevilla FC

Por su parte, el argentino no esconde su deseo de volver a Italia. Tras 5 temporadas, en las que ha conseguido un total de 25 goles y 19 asistencias en 187 partidos, el Mudo cree que es momento de salir. La participación del 22 sevillista en el equipo ha sufrido una caída en picado que va desde su puesto como recambio fijo el curso pasado, a tener un papel meramente anecdótico cuyas participaciones ocurren en encuentros puntuales y con una carga menor de nervio competitivo. Con los mismos partidos, el Mudo llevaba en la pasada temporada un total de 603 minutos; esta, 222. E incluso se quedó fuera de la convocatoria del último envite en Mestalla por decisión técnica.

Por su parte, su contrato termina en junio de 2021 y, si el Sevilla FC quiere sacar algún beneficio económico por él, tiene como última oportunidad el próximo periodo de fichajes. Y, para ello, donde mejor mercado sigue teniendo el futbolista, y donde residen sus ganas de recabar, es en una Serie A en la que la Lazio parece posicionarse como principal opción de un abanico en el que figaran, según su agente, equipos como Torino, Fiorentina o Milán. Alrededor de 12 millones pedían por él en verano, pero su valor, en parte por su falta de juego en parte por la fugacidad de compromiso contractual, ha caído considerablemente.

Alternativas en el mercado de fichajes

Con la posible salida de estos dos jugadores sobre la mesa, será momento para Monchi de cubrir los huecos con nombres que signifiquen una alternativa fiable para el mister. De tal manera, son muchos los nombres que a estas alturas suenan para reforzar el equipo en invierno. Opciones que manejaría el Director General Deportivo del Sevilla FC para la línea del ataque en el mercado de fichajes serían los nombres de los extremos Pepê o Barkok (este último conocido de selección de Bono y En-Nesyri).

Sin embargo, existe toda una ventana de posibilidades para el equipo andaluz, que pasan por jugadores deseados y que son libres para negociar con ellos a partir de primeros de año. Son así los casos de Thauvín, Draxler o Tecatito. Todos ellos, que llevan tiempo en la agenda de Monchi, pueden desenvolverse con soltura en el frente del ataque, tanto en la mediapunta como por bandas. Su polivalencia en la línea ofensiva podría ser clave para enfocar lo que resta de temporada aportando mayor valor incisivo al ataque sevillista, y podrían llegar, debido a su estado contractual, por menos dinero de su valor real.

De igual manera, son los casos de los puntas Milik, De Tomás o Giroud. El francés, aunque esta temporada ya ha demostrado de lo que es capaz en materia goleadora en el Pizjuán, pide un sueldo inabarcable para el equipo sevillano. Y el caso de Raúl De Tomás se baraja con menos hincapié ante la opción del polaco del Nápoles. Milik gusta a Monchi y es del perfil de delantero que desea Lopetegui. Su contrato termina en verano de 2021 y, si se llegara a dar la salida de Carlos Fernández y otros equipos se lanzaran a por él, el Sevilla FC podría apostar por negociar con el conjunto italiano.