El técnico soriano utilizó ante el Villarreal de Javier Calleja la misma táctica que en Vallecas, aunque no proyectó las mismas sensaciones. Con un total de 19 remates y 2 a puerta, los de Machín no lograron culminar ninguno de los intentos. Lo más cerca que estuvo de inaugurar el marcador fue una acción de Ben Yedder que acabó evitando el poste.
Vaclik y Asenjo
Los guardametas del encuentro fueron lo más destacado. Salvaron a sus respectivos equipos en varias ocasiones. El arquero del conjunto rojiblanco realizó un total de 8 paradas y podría decirse que su actuación y la del central Kjaer, fueron las más aplaudidas en Nervión. El futbolista danés, junto con Mercado y Sergi Gómez, tuvieron que aparecer cuando Ekambi y Gerard Moreno se acercaban a la zona peligrosa.
El internacional checo es titular indiscutible en la portería tras la salida de Sergio Rico a la Premier.
El duende de siempre
Resulta especialmente destacable el trabajo de las bandas, sobre todo la derecha, dónde se ubica Navas. El palaciego utiliza la misma jugada de siempre y sigue consiguiendo resultados exitosos. La acción de recortar hacia fuera y centrar ha sido su movimiento estrella y sigue causando efecto. A pesar de que ninguna finalizó en gol, el ahora carrilero demostró que sigue tan en forma como hace diez años y que es capaz de desplegarse y crear fútbol.
Pérdidas de balón
El encuentro estuvo marcado por los más de 30 grados que caían en Nervión, que obligaron a los jugadores a parar el encuentro y refrescarse, y la cantidad de balones perdidos (29) por parte de los hispalenses.
Banega, quien sigue dirigiendo el centro del campo, se vio afectado por las altas temperaturas y por el gran ritmo de los componentes del submarino amarillo. El argentino tuvo pérdidas de balón que pudieron salirle caras al equipo, pero contrarrestó esos fallos con el enlace que crea en cada jugada entre los defensores y los puntas.
Lo más comentado del partido, la escalofriante lesión de Sergio Escudero. El lateral, que se disponía a rematar en el aire, cayó con la mala fortuna de que su contrincante, Raba, estaba agachado, provocando una caída desde una altura considerable y la consiguiente luxación del codo del lateral.
Deja mejores sensaciones este Sevilla pero le falta un mundo para cuajar. De no ser por el portero no hablaríamos de un empate. A ver si dejan trabajar a Machín, completan el equipo con lo que falta y se asienta lo que hay. Necesitamos un Equipo que ilusione y que haga olvidar el triste juego de la temporada pasada.