Una de las noticias de esta semana ha sido la eliminación del Sevilla FC en la Copa del Rey. A pesar del buen partido del equipo, Osasuna consiguió la victoria en la prórroga. Yassine Bounou volvió a ser protagonista gracias a una parada antológica al Chimy Ávila. El guardameta marroquí sigue a un gran nivel, colocándole como uno de los mejores del mundo en su puesto. El portero sevillista acudió el jueves al programa A Balón Parado, donde trató varios temas relacionados con el partido copero, el Mundial con Marruecos o su gran estado de forma.
El partido ante Osasuna
La derrota ante Osasuna ha sido una de las noticias negativas en lo que va de 2023 para el Sevilla FC. Yassine Bounou ha comentado que el equipo está dolido por la eliminación copera, pero que hay que reponerse rápidamente para el partido ante el Elche: «No hay tiempo. Hay que prepararse ya para el sábado. El vestuario está dolido porque ve que está mejorando en muchas cosas pero no llegó el resultado».
También habló sobre su parada al Chimy Ávila: «Entré al descanso, estaba muy frio. Es una pelota que, si la leo un poco antes, puedo anticiparme, pero esos centros a pierna cambiada son difíciles de leer. Cuando me veo en esa situación pienso en achicar al máximo para que no sea gol, para cerrar el ángulo y salió así. El resultado al final no fue bueno y queda en segundo plano. Puede ser una de las mejores paradas de mi carrera, porque dentro de una actuación táctica mala, acabo corrigiéndola. Posiblemente si la leo antes y salgo a cortarla, no estaríamos hablando de ella».
El gran momento de Yassine Bounou
Yassine Bounou está demostrando en el terreno de juego que es uno de los mejores porteros del mundo. Así lo reconoce la FIFA, que lo ha incluido entre los cinco mejores guardametas. El marroquí lo agradece pero es consciente de que solo queda seguir trabajando: «Cuando me empecé a descubrir más a mí mismo, mi objetivo era ser uno de los mejores por muchos años, y con el trabajo estos últimos estoy considerado como uno de los porteros más importantes y eso es un orgullo para un chico que lleva tantos años trabajando. Hay que seguir en esa línea para seguir estando con los mejores. Esto es gracias al Sevilla, que me hizo ser un portero importante a nivel europeo, es una deuda que tengo».
El sevillista es el actual Zamora de la competición liguera. Para él es un galardón importante, pero pone en alza el trabajo de sus compañeros: «Tengo al trofeo en casa. El equipo venía muy bien para ser el equipo menos goleado la anterior temporada, y la siguiente se pudo lograr. Mérito del trabajo de un equipo y del cuerpo técnico que estaba antes. Es algo que va a quedar para mí para siempre. Pero siempre digo que el premio de cara al público está bien pero lo más grande es entrar a competir con alegría y felicidad».
Su Mundial con Marruecos
Una de las noticias más positivas que dejó el Mundial para el Sevilla FC fue la actuación de Yassine Bounou. El portero fue uno de los mejores jugadores de Marruecos, que acabó cuarta. Aunque para él no todo fue felicidad y reconoce que pasó malos momentos: «Para mí fue una época intensa y complicada porque venía de una situación complicada en mi vida privada, y tenía que seguir hacia delante. Cuando juego con Marruecos sé que todo el entorno con el que crecí me está mirando, siento más presión que en una final europea. No fue sencillo porque la gente rodeaba el hotel, no podías casi respirar, y después los partidos tampoco fueron fáciles. Nos tocó Canadá, que yo nací allí, y tenía presión de que pasara algo y en Marruecos se hablara algo negativo hacia mí. No quería que nos tocara España y cuando lo supimos mi móvil echó humo. España es el país que me crió y yo le debo muchísimo. Llegó un momento en el que no estaba bien hasta de salud, me sentía mareado y lo hablé con el míster. Realmente llega un momento en el que quieres escapar de eso. Pero vi la foto de mi hijo con los guantes y eso me dio fuerza para seguir».