Tras despedirse de la Copa del Rey, y con la Europa League en el horizonte, el Sevilla FC trata de sobreponerse a la racha negativa en la que anda inmerso. Tras los intentos fallidos ante Celta y Alavés para recuperar la estabilidad de antaño, el conjunto hispalense tendrá una nueva oportunidad ante el colista de La Liga. El partido del Sevilla ante el RCD Espanyol será un duelo más peligroso de lo que parece.
Antes del Sevilla FC
El combinado catalán logró su primera victoria en casa en la última jornada disputada, ante el Mallorca (1-0), tanto de Raúl de Tomás. Hace dos jornadas, cayó a domicilio frente a un Granada en estado de gracia (2-1), habiendo logrado previamente un meritorio empate ante el Athletic Club (1-1).
Novedades y enfermería
La escuadra perica cuenta con algunas novedades de cara al encuentro en el feudo rojiblanco. Entre ellas, la ausencia de Dídac Vila por sanción, o la posible entrada de Cabrera en el once titular, ocupando la posición de lateral izquierdo, pese a que regresa Pedrosa a la convocatoria. En lo que se refiere a la enfermería, se encuentra convaleciente de su lesión Sébastien Corchia, ex lateral sevillista. A él, se suma David López, quien es «el único que no ha entrenado con normalidad», según dijo Abelardo en rueda de prensa. Su presencia ya está totalmente descartada.
Raúl de Tomás, ausente
El delantero centro madrileño fue el flamante fichaje invernal que realizó la entidad blanquiazul el pasado mes de enero. Fue el principal artífice de la victoria de su equipo ante los mallorquines, anotando el único tanto del encuentro. En total desde su llegada, cuatro goles en cuatro partidos. No hay partido sin gol para este futbolista. Se ha afianzado en el once titular mediante trabajo y calidad. Pero, para fortuna de los hispalenses y desgracia de los visitantes, Raúl de Tomás no estará presente en el terreno de juego del Ramón Sánchez-Pizjuán. El futbolista ha causado baja de última hora por unas molestias en el abductor izquierdo durante el entrenamiento previo al choque.
Abelardo, vida nueva
El técnico, nacido en Gijón, cogió las riendas de un equipo hundido al final de la tabla, ya casi desesperanzado. Pero su llegada supuso un soplo de aire fresco. En cinco partidos, ocho puntos (dos victorias, dos empates y una sola derrota). Una media de 1,60 puntos por envite, dato bastante positivo teniendo en cuenta el poco tiempo que lleva al frente del banquillo catalán. Con él al frente, el Espanyol se ha vuelto un rival más peligroso y contundente, que sabe posicionarse sobre el césped y que no da un balón por perdido. No hay lugar para confiarse ante la escuadra comandada por Abelardo. Será un partido difícil para el Sevilla.
Aún, colista
La buena racha de los pericos ha apretado la zona baja de la tabla. En este momento, los tres integrantes de los puestos de condena al descenso acumulan los mismos puntos (18), estando solo a dos de la salvación, marcada por el Celta de Vigo.
Todo ello convierte al Espanyol en un contrincante que, de seguro, será más que incómodo. Una victoria les podría sacar de los puestos de descenso en el mejor de los casos, mientras que una derrota significaría una bala perdida para lograr ese ansiado objetivo. Mucho que ganar y mucho que perder. A los de Abelardo, igual que a los locales, solo les vale el triunfo. La exigencia será máxima para el cuadro de Eduardo Dato, de eso no cabe duda. El partido del Sevilla ante el Espanyol es clave para el futuro reciente en Liga.