Todavía es muy pronto para valorar al conjunto de Diego Martínez, la temporada no ha hecho más que empezar. Sin embargo, las sensaciones que transmite el equipo hasta el momento son bastante positivas. Más allá de los resultados, que son importantes, la función de cualquier filial es la de formar futbolistas para el primer equipo. La actual plantilla del Sevilla Atlético afronta la temporada, en una categoría muy disputada, con ilusión, ganas y ambición.
Calidad para afrontar la temporada
El ascenso a LaLiga 1|2|3 ha traído de la mano una revolución en la plantilla del filial. Han sido nueve los jugadores que ha fichado Monchi para el filial: Girogi Aburjania y Fabrice Ondoa (Gimnástic), Jorge Carrascal (Millonarios), Fede San Emeterio y Borja San Emeterio (Racing de Santander), Bilial Boutobba (Marsella B), Álex Muñoz (Hércules), Cristian González (Danubio) y Andrés Schetino (Fiorentina). Chavales jóvenes, con calidad y mucha proyección que, junto a los que siguen, tienen la oportunidad de jugar en la división de plata del fútbol español. Una categoría tremendamente disputada, en la que las plazas de ascenso y descenso no suelen conocerse hasta las últimas jornadas.
Al igual que ocurre con los mayores, con el transcurso de los partidos se podrá ver el potencial de la plantilla. Aunque, de momento, el juego recuerda al del año pasado, es un equipo compacto y solidario a la hora de defender. La temporada pasada el filial sevillista fue el conjunto con menos derrotas en Primera, Segunda y Segunda B y en la actual ya demuestra que será muy difícil de derrotar (0 derrotas en 3 partidos). Si bien es cierto que falta aún algo de picardía, ésta se ira adquiriendo con la experiencia, ya que cada partido es un paso adelante en la formación de los jugadores. No hay que olvidar que la edad media de la plantilla del Sevilla Atlético no llega a los 21 años.
Tiempo para la adaptación
También es cierto que se puede ver la botella medio vacía y haya quien diga que no se ha conseguido ganar aún. Opinar así, a estas alturas, no sería justo. Diego Martínez tiene por delante un trabajo difícil, debe acoplar y adaptar cuanto antes a los nuevos, pero tiene mimbres para ello. De hecho, contra el UCAM Murcia, el entrenador rojiblanco no pudo contar con Diego González (con la selección española sub 21), Giorgi Aburjania (con la selección absoluta de Georgia) y Fabrice Ondoa (con la selección absoluta de Camerún). A la ilusión y las ganas de los jugadores hay que añadir la ambición y el trabajo.
Prueba de ello fueron las palabras de Carrillo al acabar el encuentro ante los murcianos. El joven jugador se mostró contrariado por haber logrado «solo un empate ante un rival con un jugador menos». «El 0-1 fue un jarro de agua fría, pero supimos reaccionar y al final merecimos la victoria». Comentó en sala mixta. También añadió que estaba completamente seguro que el próximo partido en Lugo lograrían la victoria. «Estoy alegre por el gol marcado y contento porque el equipo sigue puntuando», concluyó. El siguiente partido liguero del Sevilla Atlético será el sábado a las 16:00 horas en Lugo.