El cuadro nervionense se llevó su primera victoria en esta fase de grupos de la Champions League 20/21. El Sevilla FC ganó al Rennes por la mínima y con cierta solvencia. Sin embargo, los de Julen tienen un serio problema de cara a portería. El equipo generó más de veinte ocasiones de peligro y solo logró un único tanto.
Un Sevilla FC con la pólvora mojada
El equipo andaluz superó al Rennes en todos los aspectos. Sin embargo, el marcador no reflejó el dominio aplastante de los sevillistas. El técnico vasco alineó prácticamente a su once de gala; Munir sustituyó al lesionado Suso y Óliver ocupó el lugar de Rakitić. Los de Julen fueron superiores al conjunto francés en todo momento, llegando a generar hasta 21 ocasiones de gol. Al igual que ocurrió en Stamford Bridge, el portero rival fue el héroe del partido.
A pesar de la escasez goleadora hispalense, Luuk de Jong volvió a marcar un gol y alcanzó la cifra de tres goles en lo que va de campaña. El ariete holandés se reivindicó dando tres puntos que valen oro. Ocampos y Munir estuvieron muy activos durante todo el encuentro, pero ninguno de los dos estuvo acertado de cara a puerta y perdonaron numerosas ocasiones.
Un Sevilla FC solvente
El cuadro hispalense volvió a demostrar una vez más su solidez defensiva, volviendo a dejar la portería a cero. Jules Koundé volvió tras pasar la covid y pareció que nunca se había ido. El francés estuvo imperial e infranqueable durante todo el encuentro. No fue el único que destacó en defensa. Tanto Diego Carlos como Fernando volvieron a demostrar su calidad, formando junto a Koundé un triángulo impenetrable ya habitual.
Uno de los protagonistas del partido fue Marcos Acuña. El argentino fue el mejor jugador del partido, incansable por la banda y dando hasta cinco pases de gol, aunque solo uno acabó transformado en el gol de Luuk de Jong. En el otro carril, Navas no defraudó, a pesar que durante el partido se le vio con problemas físicos en el aductor. El capitán se mostró seguro en defensa y generó peligro desde la banda derecha. Una de las novedades en el once fue la presencia de Óliver en lugar de Iván Rakitić. El interior español jugó a un gran nivel, dirigiendo el timón del equipo hispalense. Además, Joan Jordán volvió a ser titular tras su sanción en Liga. El centrocampista catalán realizó un gran encuentro, sosteniendo junto a Fernando al equipo nervionense. Además, ayudó a Óliver en labores de construcción.
Destino Bilbao
Tras la solvente victoria frente al Rennes, el Sevilla FC ya tiene la mirada puesta en el choque frente al Athletic Club del próximo sábado (16.15h). Los de Julen afrontarán un partido clave, ya que acumulan un parcial de un punto de nueve en los tres últimos compromisos ligueros. A pesar de que será el cuarto partido en apenas quince días, se espera que los de Nervión salgan con todo en San Mamés. El cuadro andaluz está obligado a ganar si no quiere descolgarse de los puestos altos del campeonato.