El Sevilla encara la penúltima jornada de LaLiga con todo aún por decidir. Un solo punto les bastaría a los de Joaquín Caparrós para asegurar, como mínimo, la sexta plaza y, así, no jugársela ante el Athletic Club en el último partido. Para intentar conquistar el feudo colchonero, el técnico utrerano no podrá contar con todos sus efectivos. Ya parece costumbre en esta temporada, pues el reguero de lesiones que lleva este año el equipo de Nervión es cuantioso, además, la mayoría de ellas han afectado a la defensa. A continuación repasamos las bajas de cara al domingo.
Daniel Carriço
El central luso de 30 años no estará en la convocatoria para el partido de la jornada 37 debido a la lesión sufrida ante el Girona CF. Las molestias en el cuádriceps de su pierna izquierda no cesan y todo apunta a que tampoco podrá estar disponible para el último partido. Es una baja muy importante para la defensa sevillista, pues sin Daniel Carriço el equipo sevillista ha jugado un total de once partidos, de los cuales solo ha sido capaz de ganar uno.
André Silva
El delantero portugués sigue siendo toda una incógnita y parece ser que lo que pasa con André Silva no es tanto cuestión médica. Todo indica a que el Sevilla no efectuará la opción de compra sobre el luso y esa decisión ha enfriado la importancia del delantero en el equipo. Lleva desde la jornada 30 sin aparecer ni siquiera en la lista de dieciocho sevillista y, aunque parezca que no intervendrá en ningún partido más con el Sevilla, es indudable que en su inicio de temporada fue temible para las defensas contrarias.
Maximiliano Wöber
El joven defensa sigue recuperándose de su lesión producida ante el Valencia CF. El austriaco tiene un desgarro en el menisco que le imposibilita totalmente su aparición en lo que resta de temporada y pretemporada de la siguiente. Una lesión muy grave que llegó cuando parecía haber encontrado su sitio en el once sevillista.
Éver Banega
El centrocampista cumplirá el segundo partido de su sanción en LaLiga. Ante el Getafe, tras una entrada muy fea, el argentino vio su segunda tarjeta roja en esta temporada liguera, pero lo peor fue la dura suspensión que recibió por ello. Hasta cuatro jornadas tiene que estar en el dique seco Banega, esto hace que se pierda también el último partido e incluso el primero de la siguiente temporada.
Cogidos por alfileres
Ya se ha hecho costumbre esta temporada que cada semana el técnico sevillista se vea obligado a hacer auténticas maniobras para preparar ya no solo la convocatoria, sino el once para el partido correspondiente. La mala suerte del Sevilla con las lesiones no parece tener fin, aunque Sergio Escudero calmó las alarmas que saltaron en el entrenamiento del jueves. El vallisoletano no se ejerció con el resto del grupo, pero en la jornada matinal del viernes se ha incorporado al grupo y asegura su presencia ante el Atlético de Madrid.