Aunque el juego del Sevilla sigue sin convencer, los tres puntos conseguidos frente al Celta dan un impulso fundamental al equipo y lo colocan en la parte alta de la tabla. De este modo, la remontada cosechada da moral al equipo sevillista, que continúa con dudas y necesita tener más seguridad en sí mismo si quiere aspirar a hacer una buena temporada.
La Champions, más cerca
Tras el empate entre Atlético de Madrid y Real Madrid, la victoria sevillista acerca a los de Nervión a los puestos de Champions League, situándose a sólo dos puntos de los equipos madrileños. Ante el gran inicio del Valencia, parece más viable alcanzar al Atlético y el Sevilla debe aprovechar que los colchoneros no están bien.
El Sevilla, que demostró carácter y personalidad para sobreponerse al gol inicial del Celta, mejoró en algunas facetas del juego y dominó a un incómodo rival. Sin embargo, todavía conserva la fragilidad en las dos áreas: perdona demasiado en ataque y concede mucho en defensa.
Muriel va a más
Una de las notas positivas del partido fue ver la mejoría de Muriel. Corrió, desbordó y jugó con inteligencia con sus compañeros. Su gol reanimó al equipo y fue clave en la victoria. Es potente y crea mucho peligro. Sin duda, ahí hay buen futbolista y debe ir creciendo su rol en el equipo. Por otra parte, el alemán Geis también destacó como central, un puesto que no es el suyo, pero en el que demostró su gran toque de balón.
Lo peor, la inseguridad del equipo
A pesar de la victoria, el Sevilla bien pudo perder el partido en el primer tiempo, en el que el Celta perdonó el segundo gol con ocasiones muy claras. La confianza y el estado de ánimo son decisivas, y hoy por hoy el Sevilla no se fía de sí mismo. El equipo duda, la afición murmura y los errores en las áreas le salen muy caros.