Con la esperanza de continuar en la lucha por entrar en Europa League, el Sevilla viaja a la Coruña en un partido muy relevante para dilucidar la clasificación final. La final de Copa del Rey está a la vuelta de la esquina, pero los objetivos ligueros son demasiado importantes como para dejarlos de lado. Además, el encuentro se antoja bastante complicado, principalmente por el buen momento que vive el Deportivo de la Coruña. El sufrido empate contra el Villarreal sigue dejando opciones a los de Montella para jugar la Europa League la próxima temporada y el primer paso está en Riazor.
Un estadio muy propicio
El Sevilla ha sabido manejarse bastante bien en el feudo coruñés en los últimos años. Desde 2009, el Deportivo no ha logrado vencer al equipo sevillista en su propio estadio. La última victoria fue por 1-0 con gol de Juan Rodríguez. Desde entonces, ambos equipos se han enfrentado en cinco ocasiones con tres victorias sevillistas y dos empates. Además, es un encuentro que en las últimas ocasiones ha dejado bastantes goles, como en la pasada temporada donde el marcador fue de 2-3 o el disputado dos temporadas atrás, con un partido vibrante que finalizó con un 3-4 favorable para el Sevilla.
Objetivos muy complicados
Dejando a un lado la casi inexistente lucha por los puestos de Liga de Campeones, el Sevilla se encuentra al filo de la navaja en lo que a la Europa League respecta. Cinco jornadas sin conocer la victoria desde luego que no ayudan, más aún si se observa la alarmante diferencia entre goles a favor y en contra. Esta racha es la que ha hecho no solo que sus rivales le superen, sino que incluso marquen una distancia considerable. Con todo ello, el conjunto nervionense se encuentra séptimo clasificado con 47 puntos, a uno del Villarreal que marca la zona de Europa League. El empate le valdría incluso a los de Montella para dormir en puestos europeos.
El Deportivo de la Coruña parece haber recuperado las ganas de competir hasta el último partido. Tras varios cambios de entrenador, el conjunto gallego sigue en puestos de descenso pero las sensaciones son algo diferentes. Encadena dos victorias consecutivas que le han dado posibilidades reales para la salvación y, sobretodo, moral para lo que queda de Liga. Cinco puntos es la distancia que necesita recortar al Levante, equipo que marca la permanencia.
Muriel contra Adrián
La temporada sigue siendo un calvario para Luis Muriel. Montella ha depositado mucha confianza en él, pero el colombiano sigue lejos del nivel esperado y sus números son demasiado escasos. Siete goles en 25 partidos de Liga disputados, cifras muy bajas para la principal inversión del conjunto nervionense en el pasado mercado estival. Incluso, Adrián ha sido capaz de superarle, gracias sobretodo a los últimos partidos. El delantero asturiano llega en un gran momento de forma con cuatro goles en los últimos dos encuentros. Nueve goles en total en la competición liguera que le dan fuerzas al Deportivo para seguir luchando.
Irregularidad compartida
Tanto Montella como Seedorf tomaron a sus equipos en situaciones muy delicadas. El técnico italiano ha realizado un buen papel tanto en Champions como en Copa del Rey. No obstante, en Liga los vaivenes han sido constantes. A la nula regularidad del equipo se unen varias goleadas bastante dolorosas contra Betis, Atlético de Madrid o incluso Eibar. Suma cinco partidos sin ganar y Europa se aleja por momentos. Para Seedorf el camino también ha sido un suplicio. Contra el Málaga fue su primera victoria, tras nueve partidos con el equipo gallego. Ambos entrenadores colisionan en busca de objetivos muy diferentes, aunque con multitud de dificultades.