El Sevilla FC, si quiere seguir creciendo como club, no puede permitirse no entrar en Europa
Por muy increíble que parezca, ahora mismo el Sevilla FC, con el mayor presupuesto de su historia, tiene como principal aspiración en esta Liga acabar entre los seis primeros clasificados. Como es lógico, en el club no cambian el discurso de pelear por la cuarta plaza, pero los diez puntos de desventaja respecto al Atleti, los ocho ante el Valencia y los tres ante el Madrid con un partido menos, dejan claro que esta empresa es casi utópica y que todo se reducirá a intentar quedar entre los seis primeros puestos.
El futuro del club está en juego, por lo que cada fin de semana los futbolistas de Vincenzo Montella estarán obligados a dar el máximo de sí mismos. De hecho, el propio técnico italiano ha reconocido que el vestuario debe encontrar un equilibrio en los partidos para obtener buenos resultados. En juego, volver a lograr por tercer año consecutivo la clasificación para la próxima edición de la Champions League.
Ahora por suerte, los cuatro primeros de La Liga obtienen clasificación directa para la máxima competición continental, el cuarto clasificado no tendrá que jugar ninguna previa en verano. Los rivales, por delante (sin contar al FC Barcelona), el Atlético es segundo con 39 puntos y el Valencia tercero con 37. Y en cuarta plaza está el Real Madrid con 32, aunque con un partido menos disputado (el de Leganés que jugará en febrero). El Villarreal nos persigue a solo un punto, es 6º con 28, pero visitarán el Santiago Bernabéu el próximo sábado. Un empate sería un gran resultado para los intereses del conjunto nervionense.
Lo que sí está ya muy claro para el sevillismo es que el calendario promete “ayudar” en esta empresa en el mes de enero, donde nos enfrentamos a rivales teóricamente inferiores. Eso sí, no hay ninguna opción de relajarse. La distancia con los equipos que están ahora mismo en mitad de tabla es mínima y más tropiezos podrían dejar a los nervionenses descolgados respecto al podio de la Liga y ‘calentar’ mucho la pelea por los puestos europeos. Algo que por prestigio e imagen el pentacampeón de la Europa League no se puede permitir.