Con tan sólo 23 años, Julian Draxler es pretendido por grandes clubes del viejo continente como PSG, Arsenal o Juventus. A estos equipos se suma el Sevilla FC, que pretende reforzar la plantilla de cara a lo que queda de temporada, para afrontar la fase final de la Champions a un alto nivel competitivo. Actualmente milita en el VfL Wolfsburgo, club que lo fichó por 36 millones de euros, cuando aún jugaba en el Schalke 04 en la temporada 15/16. La gran apuesta del club alemán es una de las limitaciones para poder incorporarlo en este mercado de invierno a Nervión, pues la intención del club bávaro sería la de recuperar parte de la inversión realizada, es decir, en torno a 30 millones de euros.
Si bien es cierto que el Sevilla ha acumulado ingresos tras su exitosa clasificación para Champions, aunque la entidad siempre ha sido conservadora a la hora de apostar monetariamente por un jugador. El alemán, campeón del mundo con su selección en el Mundial de Brasil 2014, no lleva una gran temporada, pues acumula sólo 1 asistencia en 13 partidos. Sin embargo, en su etapa en el Schalke 04, marcó 30 goles y dio 29 asistencias en 170 partidos. Estos números hacen de Draxler un interesante jugador para reforzar la plantilla.
La opción de la cesión
La otra opción, que desde luego vería con buenos ojos la planta noble del Sánchez-Pizjuán, sería la cesión del jugador. Al igual que Nasri, Draxler podría llegar a Nervión como cedido e incluso llegar a incorporar una opción de compra. De esta forma, el Sevilla podría centrarse en reforzar la defensa con un central, zona que Sampaoli ha declarado muy frágil por culpa de las lesiones. También es necesaria la incorporación de un delantero de nivel que compita con Vietto y Ben Yedder. Durante los últimos tiempos y a raíz de sus últimas visitas, ha sonado mucho el nombre de Carlos Bacca, aunque hasta el mes de enero no sabremos nada.