El Sevilla de Eduardo Berizzo atraviesa una mala racha. Tras perder ante el Athletic Club de Bilbao, el Spartak de Moscú y ahora ante el Valencia CF, todas las miradas están puestas en la dirección deportiva que dirige Óscar Árias tras la salida de Monchi. Nombres como Stevan Jovetic o Carlos Bacca vuelven a sonar, pero esta vez sobre el por qué de no haberlos traído este pasado verano, pues ahora más que nunca es cuando se está viendo que la planificación deportiva ha tenido algunos fallos.
Jovetic y Bacca están rindiendo
El jugador montenegrino, delantero por el que muchos aficionados sevillistas suspiraban, esperó al conjunto de Eduardo Berizzo hasta última hora, pero finalmente acabó haciendo las maletas al AS Mónaco tras ser traspasado por el Inter de Milan (el Sevilla tuvo una opción de compra por el montenegrino pero a pesar de conseguir bajar ese precio de compra, el jugador no llegó a Nervión). A día de hoy Stevan Jovetic ha disputado cuatro encuentros con la camiseta del Mónaco en los que ha anotado un solo tanto, pues actualmente se encuentra sancionado. Por otro lado encontramos a Carlos Bacca que se marchó cedido del AC Milan al Villarreal, y que también esperó una oferta del Sevilla FC, pues su deseo y el de su familia era vivir de nuevo en la capital hispalense.
Si hubiera llegado alguna de estas dos alternativas a Nervión para competir junto a Ben Yedder y Luis Muriel (quienes están dejando mucho que desear, sobre todo el colombiano tras ser el fichaje más caro de la historia del club), quizás los goles llegarían con más frecuencia. El primer gran fallo de la planificación deportiva de esta temporada ha sido el no traer a un tercer delantero.
La defensa, asignatura pendiente
Simon Kjaer ha sido el que ha llegado para competir con Lenglet, Carriço y Pareja en la zaga de la defensa. Una defensa muy cuestionada sobre todo por las lesiones de los dos últimos y capitanes de esta temporada. Otro fallo en la planificación deportiva, pues solo Lenglet y Kjaer son los centrales puros capaces de jugar en el eje de la zaga. Gabriel Mercado también puede actuar en el centro de la defensa, pero Berizzo lo emplea como carrilero derecho. Sin duda alguna otro fallo de la dirección deportiva, que sabiendo las debilidades de Pareja y Carriço, ha sido el no traer a otro zaguero. Habrá que esperar a Enero por si la dirección deportiva decide ir al mercado de fichajes ante las horas bajas de la defensa sevillista, pues por el momento, este Sevilla de Eduardo Berizzo es muy frágil en defensa y muy fallón en la delantera. Ni tiene gol y encima te meten cada vez que llegan.