Las comparaciones son tan odiosas como inevitables. Y en el fútbol, aún más si cabe. Por eso, y transcurrido casi un tercio de campeonato, resulta complicado no comparar al Sevilla de Berizzo con el de su antecesor Sampaoli.
Números muy parejos
A pesar de lo que pudiera pensarse a priori, el Sevilla llegó al parón tanto en la temporada 2016-17 como en la presente campaña a la jornada decimoprimera con una situación muy pareja. Y es que, aunque las sensaciones y síntomas del equipo eran diferentes, tampoco el año pasado el Sevilla había arrancado del todo cuando afrontó el parón de selecciones de noviembre.
Disputadas 11 jornadas, los de Berizzo cuentan con 19 puntos que le valen la sexta plaza en la clasificación. En el caso del Sevilla de Sampaoli, a esa misma altura del torneo contaba con sólo dos puntos más (21), que le daban para alcanzar la quinta posición.
Diferentes sensaciones y estilo del equipo
Sin embargo, en el caso de la Champions, Sampaoli afrontaba un grupo más exigente (Juventus, Lyon y Dinamo de Zagreb), mostrando una buena cara en la competición, mientras que el Sevilla de Berizzo ha sufrido esta temporada una goleada muy dolorosa en Moscú y sigue sin dar el paso definitivo en el torneo.
Aunque los números de un técnico y otro son parecidos en cuanto a puntos y clasificación en noviembre, no hay rastro de las sensaciones positivas que tanto ilusionaron la temporada pasada en Nervión. 19 goles a favor y 15 en contra y, sobre todo, una apuesta por un fútbol total comenzaba a cimentarse y terminaría por explotar poco después del parón el año pasado. En cambio, el equipo de Berizzo aún está pérdido y continúa buscando su identidad, con una menor alegría en el juego y las áreas (12 goles a favor y 11 en contra).
Con todo, no hay tanta diferencia entre la presente temporada y la anterior. La clave para que Berizzo consiga emular a su predecesor será ver cómo vuelve el Sevilla tras el parón. Esta semana debe ser fundamental para ensamblar las piezas del vestuario hispalense y enderezar el rumbo definitivamente.