El club hispalense se siente perseguido y considera un abuso que siempre se vaya contra la entidad nervionense. El agravio que siente el club, único propuesto para sanción a pesar de episodios como «Shakira es de todos» o «Iniesta subnormal», ha colmado ya el vaso y declara la guerra al comité.
El Sevilla Fútbol Club ha emitido un comunicado oficial ante la propuesta de sanción del Comité Antiviolencia de 120.000€. En el mismo, la entidad presidida por José Castro se muestra muy dura y crítica con la nota informativa aparecida en la web del Consejo Superior de Deportes, acerca de las decisiones adoptadas por la Comisión Permanente de la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la intolerancia en el Deporte.
Tras reproducir dicha nota, el club se ha limitado a exponer su parecer y condenar fehacientemente los puntos de los que se acusa al Sevilla Fútbol Club, llegando incluso a hablar de una “persecución injustificada y obsesiva contra la entidad, sus dirigentes y sus aficionados”, por parte de la Comisión Antiviolencia. Al mismo tiempo, hace público su pesar por la pasividad mostrada por la LFP ante los ataques reiterados de dicho órgano contra uno de sus afiliados.
La nota oficial comienza mostrando la sorpresa del club por la propuesta de sanción y manifestando la disposición del club de dejar el asunto en manos de sus servicios jurídicos, haciendo hincapié en que se “reservan el ejercicio de las acciones de todo tipo, incluidas las penales, contra la comisión estatal”. A continuación, el club utiliza este comunicado oficial para desmentir y tachar de “tendenciosas, esperpénticas, rebuscadas, maliciosamente disparatadas, falsas, malintencionadas y falaces” las acusaciones a las que se somete al club sevillista.
El tono de la nota va subiendo cuando se va enumerando los hechos por los que se proponen la sanción. Tales hechos, recordamos, son “promocionar y favorecer las actividades que realizan grupos violentos”, “promocionar grupos radicales y violentos” y “falta de colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado”, entre otros. El club ha querido también recalcar la colaboración que realiza con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, autoridades policiales y gubernativas, y resaltar la participación activa de la entidad en “cualquier reunión, normativa o regulación”.
En defensa de los aficionados
La directiva presidida por Castro también ha querido defender a sus aficionados ante las acusaciones recibidas. Desde la Comisión Antiviolencia se afirmó que el Sevilla tiene a los Biris inscritos en el Libro Registro de Seguidores del Sevilla FC como un grupo “radical y violento”; sin embargo, la entidad se ha encargado de desmentir tal hecho y ha dejado claro que en dicho libro, el citado grupo de seguidores aparece como “Grupo BIRIS” o “BIRIS NORTE”. Ante tal acusación, el club indica que dicha “afirmación realizada por la Comisión referente al reconocimiento por el club del carácter violento de algún grupo o colectivo de sus aficionados, no sólo es falsa sino también deliberadamente malintencionada”.
En los próximos días, el club prepara actuaciones en contra de esta propuesta de sanción y del agravio del que se quejan, además del trato que está recibiendo por parte de la Comisión Antiviolencia. Mientras el Sevilla recibe propuesta de sanción por lucir una pancarta mostrando la frase «Se formó la gozadera«, las pancartas mostradas por aficionados del Espanyol, como la que rezaba «Shakira es de todos«, reciben un trato diferente, al igual que los cánticos de «Iniesta subnormal» que se escucharon en el estadio del Athletic de Bilbao hace una semana.