André Silva llegó al Sevilla en verano sin el beneplácito unánime de la afición. El club quería a Batshuayi, pero el belga se decidió por el Valencia. Eso le abrió la puerta de Nervión al atacante luso del Milán y el resto de la historia se escribe a base de goles del portugués. El máximo goleador del Sevilla en Liga fue el invitado de Roberto Arrocha en el programa A balón parado, del canal de televisión del club rojiblanco.
«No me pongo límites y busco dar lo mejor de mí y crecer»
André Silva, como no podía ser de otra manera, comenzó refiriéndose al excelso momento que atraviesa el equipo. Líder de la Primera División y con muy buenas sensaciones, el ariete afirmó sonriente: «Es una felicidad enorme, un orgullo para nosotros porque estamos los primeros y hay que disfrutarlo. Casi no da tiempo porque ahora tenemos la Europa League y hay que cambiar la mentalidad. Luego, vendrá otro partido de La Liga y las cosas pasan muy rápido». Al respecto del rendimiento de la plantilla y el suyo personal, André Silva reconoció que su forma de pensar conlleva sacrificio y mucho esfuerzo: «No llevo muchos años jugando, pero no me pongo límites y busco dar lo mejor de mí y crecer. Es verdad que el talento da mucho, pero lo importante es el trabajo y la mentalidad. Hay gente que dice que no puede conseguir algo y ahí el 90% del camino ya está mal hecho. Lo primero que hay que hacer es pensar que se puede conseguir para poder hacerlo». En cuanto al trabajo del equipo, Silva explicó: «En este equipo, hay gente con muchas ganas de ganar. No les gusta perder ni un poquito. Sólo ganar, ganar y ganar. Cuando jugamos a cualquier cosa y hace a otro cualquier broma de que ha perdido, a nadie le gusta».
Con esta mentalidad de esfuerzo y superación, André Silva se refirió también a la relación que tiene su forma de pensar con su llegada al Sevilla: «La vida da muchas vueltas y pienso siempre en cambiar para positivo. Pienso que, si hay cambiar que sea para crecer, para las buenas experiencias y está yendo bien».